Símbolo de vigilancia y unión

Con la fatiga política que estamos sufriendo en estos días, es necesario tomar un receso; con esto en mente le pregunto, ¿cree usted que el hombre es el símbolo de vigilancia y unión? 

Dicen que el ser humano es el animal más inteligente sobre la faz de la tierra. Pero, el símbolo de vigilancia y unión es un ave, el ganso. El ganso es un ave palmípeda doméstica. Tiene el plumaje gris y rayado de pardo. Es más oscuro en la cabeza y en el cuello. Tiene el pecho y el vientre amarillento. El pico anaranjado, casi negro en la punta y en la base. Los pies rojizos, y es menos acuático que el pato.

Los gansos vuelan al sur en el otoño. Siempre forman una «V» al volar. Científicamente se ha comprobado que, cuando el ganso bate sus alas, produce una corriente de viento en el aire que ayuda con aliento y energía al que le sigue en la formación.

Volando en «V», los gansos usan menos energía, aumentando así la capacidad de volar. Cada vez que un ganso se sale de la formación, siente inmediatamente la resistencia del aire, se enfrenta a la dificultad de hacerlo solo, y rápidamente regresa a su formación. El líder de la bandada vuela solo y al frente. Cuando se cansa, pasa del puesto de liderazgo a otro, y se mueve sin problema a un puesto de atrás en la formación. Los gansos al volar graznan, ese graznido que emiten los va estimulando a mantener la velocidad.

Cuando un ganso se enferma, o cae herido, dos gansos salen de la formación, lo siguen para ayudarlo y protegerlo. Se quedan acompañándolo hasta que puede volar, o hasta que muere. Solamente entonces, los dos gansos vuelven a su bandada, o se unen a otro grupo de gansos.

Esta ave no tiene nada parecido al hombre, pero si tuviéramos la sutileza del ganso, nos mantendríamos uno al lado del otro, apoyándonos y acompañándonos. Entenderíamos que una palabra de aliento, una nota positiva, verdaderamente trae grandes beneficios. Si nosotros como seres humanos, gozáramos de esa astucia, intuición, inteligencia y comprensión distintiva del ganso, nos mantendríamos unidos. Buscaríamos la compañía, la unidad y la amistad de aquellos que van hacia una meta igual o parecida a la nuestra. Mantendríamos la unidad con todo aquel que vive su vida regida por una moral igual a la nuestra y con propósitos parecidos a los nuestros. No daríamos lugar a la envidia, que incita el ansia de poder. Seríamos líderes genuinos. 

No cabe duda, los mejores resultados se obtienen cuando se trabaja en equipo. Para obtener resultados positivos en la vida hay que trabajar fuerte, eliminar los malos hábitos, especialmente la envidia y, sobre todo, el deseo cegador del poder. Las personas que comparten una meta común y tienen sentido de comunidad, pueden lograr más fácil y rápidamente sus metas, apoyándose mutuamente.

“En la unión está la fuerza”. Ramón Emeterio Betances.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí