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«Cuenten cada voto»

US Actor Mark Ruffalo. EFE/EPA/Stephanie Lecocq/ARCHIVO

“Cuenten cada voto». Ese es el lema que los demócratas están usando en las redes para rechazar que el presidente Donald Trump se proclame ganador de las elecciones sin terminar el conteo, y a ese intento por evitar un fraude electoral se han unido numerosas estrellas de Hollywood y del mundo del espectáculo.

«Votamos y usamos nuestras voces. Es tiempo de honrar eso y de asegurarnos de que cuenten cada voto antes de proclamar un ganador«, escribió en Twitter Mark Ruffalo, uno de los actores de Hollywood más comprometidos con los demócratas en los Estados Unidos.

«Cada voto en este país importa; ¡será contado e importará! ¡Es el emblema de nuestra democracia!», defendió Lady Gaga, que se volcó en la recta final de la campaña para respaldar al candidato demócrata Joe Biden.

«Las papeletas por correo no son ‘una sorpresa’: son papeletas. Son votos. Y necesitan ser contados», apuntó por su parte Kerry Washington.

«Os lo dije a todos. Simplemente sed pacientes. Relax y contad cada voto», afirmó Josh Gad.

John Legend aseguró que esta incertidumbre le recuerda mucho a las elecciones legislativas de medio mandato de 2018.

«Mucho estrés y opiniones prematuras hasta que todos los votos fueron contados y a los demócratas les había ido bastante bien. Dejemos que cuenten», indicó.

Y America Ferrera también subrayó que no tener resultados el mismo día de la votación no es algo inusual en unas elecciones generales de EE. UU.

«Nuestra democracia se fundó en el derecho a votar y la creencia de que cada voto cuenta. Esta elección ya es suficientemente caótica: no dejes que las falsas expectativas lo empeoren. No hay un ganador antes de que todos los votos sean validados y contados. No importa cuánto tiempo se tarde en eso: tenemos que asegurarnos de que cada voto se cuente», señaló.

Katy Perry lo resumió en un sentido similar: «Cada estadounidense cuenta: contad cada voto».

«Como votantes, acudimos a las urnas en números récord pese a una pandemia, un colapso económico e intentos para detenernos. Ahora nos vamos a asegura de que cada voto cuente», escribió, Alyssa Milano.

La lista sigue

Brad Pitt se sumó a los apoyos al candidato demócrata, al prestar su voz para un anuncio de campaña estrenado poco día antes de las elecciones.

«Estados Unidos es un lugar para todos. Aquellos que eligen a este país, que luchan por él. Algunos republicanos, otros demócratas y la mayoría en el medio buscando lo mismo: alguien que entienda sus esperanzas, sueños y dolores», indicó Pitt.

El actor estadounidense Brad Pitt posa en la alfombra roja de la 92a ceremonia anual de los Premios de la Academia, en el Teatro Dolby de Hollywood, California (EE.UU.). EFE/ Emilio Flores/Archivo

La semana anterior la mayoría del reparto de «Avengers», la saga más taquillera del cine organizó un evento virtual junto a Kamala Harris, candidata a la Vicepresidencia. Chris Evans, Scarlett Johansson, Mark Ruffalo, Don Cheadle, Paul Rudd y Zoë Saldaña se apuntaron a la iniciativa.

También Taylor Swift, la artista que más discos ha vendido en esta década, pidió el voto por Biden una vez que ha roto su silencio en cuestiones políticas durante el mandato de Donald Trump.

Billie Eilish, artista del momento y triunfadora de los últimos Grammy, aseguró que Trump: «Está destruyendo nuestro país y todo lo que nos importa».

Otra fecha de Champions League

Barcelona derrotó sin mucho a una desconocida Juventus. Foto Redes

Pittsburgh, PA. – ¿Cómo podríamos resumir la segunda fecha? Real ganó el clásico contra el Barcelona, pero no pudo en Champions League contra el Borussia Monchengladbach. El Manchester City ganó de visitante; Liverpool ganó, pero no convence; el campeón, Bayern Múnich, cabalga el torneo y no se ve un rival que le pueda vencer. En el juego de la fecha, la Juve cayó en Turín frente al Barcelona, en una noche terrible del cuadro italiano, y el Man-United goleó en casa y está montándose en el bus de los favoritos.

La fecha fue un poco más movida que la primera. Sobre el Real Madrid, no es sorpresa lo que está pasando; el equipo no gusta, ganó contra el Barcelona, pero sin convencer, vencieron más por los errores del equipo culé que por su propio juego. En la Champions no es diferente; no juega bien, y apenas rescataron un empate a 2 goles contra el Gladbach en Alemania; pero el equipo no da signos de vida. Hay jugadores que en otros equipos serían titulares indiscutibles, mientras que, para Zidane, apenas merecen puesto en el banco. En conclusión, Modric y Hazard en la banca y Ascencio con Valverde titulares; la verdad, Zidane no encuentra el equipo y la orejona se ve lejos de los merengues.

El Real Madrid salvó un punto frente al Borussia Monchengladbach. Foto Redes

El campeón sigue ganando, y esta vez de visita en Rusia contra el Lokomotiv, 2-1; el Bayern a veces no necesita golear, al contrario, para demostrar su nivel les basta hacer las cosas bien y ser prácticos; ganaron con lo justo, pero eso es suficiente. Por su parte, el Manchester City hizo el juego que quería y ganó otra vez, ahora 3-0 contra el Marsella en Francia, y mostrando que, si en la Premier League no les rinde, en la Champions, van subiendo de nivel. Bien por Guardiola, que poco a poco va encontrando el equipo.

El Liverpool volvió a ganar en Champions, 2-0 contra el Midtjylland, de Dinamarca, y va con puntaje perfecto en estas dos primeras fechas, pero sigue en deuda, no se ve como ese firme favorito al que nos tiene acostumbrados. El equipo tiene problemas en la defensa; primero se quedó sin Van Dijk, por lesión en el derbi contra el Everton y, en este juego, jugó sin Fabinho, un jugador que cumplía funciones de defensa central o de volante de marca. Así, Klop tendrá que buscar quienes los reemplacen y pronto, porque se viene la próxima fecha contra el Atalanta en Italia.  

Liverpool derrotó al Midtjylland, 2-0, en Anfield. Foto Redes

Y de pronto uno ve al Manchester United, y no gusta; que no juega bien, que el técnico Solskjaer en unos juegos para bien a sus 11, pero en otros parece que no le entienden lo que plantea. En estas dos primeras fechas el equipo es consistente, seguro atrás; la conexión Bruno Fernández con Martial y Rashford es perfecta; en 27 minutos el equipo marcó 4 goles. Cuando tuvo el tridente, el United liquidó al Leipzig. El líder de la Bundesliga aguantó el juego en el Old Trafford hasta el minuto 74, pero Rachford encontró el gol de la tranquilidad y otros 3 llegaron para los diablos rojos. Gran partido del Manchester, que empieza a perfilarse como favorito.

Noche mágica de Marcus Rashford al hacer 3 de los 5 goles contra el Leipzig. Foto Redes

El partido de la fecha era, sin duda, la Juventus contra el Barcelona. Aunque todo el mundo esperaba el duelo Ronaldo vs Messi, este nos dejó esperando; por tercera vez, Ronaldo dio positivo al COVID-19 y quedó fuera. Messi si jugó y mostró su fútbol, pero la Juventus está lejos de su nivel, no juega a lo suyo, muy lento, no coordina, no hay un mediocampo que lleve el balón a sus delanteros. Cuadrado, Morata y Bonucci sacan la cara por el cuadro de Turín, mientras anda muy flojo Dybala. Falta en este equipo alguien más en la mitad y, por supuesto, falta Ronaldo. Messi práctico, tranquilo, lideró al Barça, que encontró el primer gol en un taponazo de Dembele al minuto 14, y la Juventus ya no pudo remontar, nunca reaccionó. Barcelona jugó bien y ganó 3 puntos en Italia ante la impotencia del rival. El segundo gol fue un penal cobrado por Messi, que dejó el resultado 2-0. Andrea Pirlo fue un gran jugador, pero sigo con dudas sobre si llegará a ser un gran técnico.

Más de fútbol en nuestra siguiente edición. ¡Hasta la próxima! Dariofdo0101@gmail.com

Histórica participación electoral

Foto ilustrativa EFE

La participación en estas elecciones en Estados Unidos fue la más alta en 120 años, y el candidato demócrata, Joe Biden, ya ha batido el récord de ostentaba Barack Obama al convertirse en el aspirante presidencial que ha recibido más votos en la historia del país. Según las estimaciones actualizadas por “Election Project”, al menos 66,7 % de los estadounidenses con derecho a voto participaron en las elecciones de este martes, la tasa más alta desde 1900, cuando ese índice fue de 73,7 %.

Casi 160 millones de los aproximadamente 238 millones de estadounidenses con derecho a voto acudieron a las urnas o enviaron su voto por correo en estas elecciones, un aumento notable respecto a los casi 139 millones de sufragios que se emitieron en las últimas elecciones presidenciales, en 2016.

Los ajustados resultados en varios estados clave mantuvieron la expectativa para proclamar un ganador.

Sin embargo, Biden para la tarde del miércoles ya se había convertido en el candidato presidencial que ha conseguido más votos en la historia de EE. UU., con al menos 70,1 millones de sufragios, superando el récord de 69,5 millones que marcó Obama durante su primera campaña presidencial, en 2008.

Es posible que Trump también supere la marca de Obama una vez que se cuenten todos los votos.

En 2016, la candidata demócrata Hillary Clinton ganó el voto popular por más de 3 millones de votos sobre Trump-, pero aun así no obtuvo las llaves de la Casa Blanca.

La razón fue que las elecciones en Estados Unidos no se deciden por el voto popular, sino por el sistema del Colegio Electoral, un órgano integrado por 538 delegados que eligen los estados en función de su población. El que se lleve 270 es el ganador.

El candidato ganador en cada estado, aunque sea por un solo voto, se lleva todos sus compromisarios de ese territorio, con la excepción de Nebraska y Maine, que dividen sus delegados.

La participación en esta consulta sería la más alta desde 1908, cuando el 65,7 % de los votantes posibles emitieron sus votos.

Esta circunstancia, se produjo antes de que Estados Unidos cambiara su constitución y permitiera el derecho al voto de las mujeres que el pasado 2 de noviembre cumplió un centenario.

Los comicios se han visto condicionados por la pandemia del coronavirus, que ha causado más de 9,3 millones de contagios confirmados y 232.000 muertes en Estados Unidos.

Debido a esto, la participación anticipada alcanzó también un récord al superar los 100 millones de electores, de los que 35,9 millones corresponden a sufragios emitidos en persona en las pasadas jornadas y otros 64,8 millones a votos por correo, según la organización U.S. Elections Project de la Universidad de Florida.

El voto latino, más numeroso y crucial que nunca

Los latinos serán por primera vez la minoría más numerosa del electorado de Estados Unidos , de 32 millones de posibles electores se esperaba que al menos votaran 14,6 millones de hispanos , lo que significá un aumento del 15 % en relación a las presidenciales de 2016 en un crecimiento que ha traído una diversidad sin precedentes al país.

“(El voto latino) Es fundamental pero no es monolítico”, dijo a Efe Frank Mora, profesor de política en la Universidad Internacional de Florida.

“Según las encuestas el candidato presidencial demócrata Joe Biden tiene el 65 % del voto latino y el presidente Donald Trump tiene un 28 %”, añadió Mora. “La diferencia en relación con la elección de 2016 es que este año los latinos salen a votar en gran número, algo no visto hace cuatro años”.

Según el Centro Pew, en estas elecciones los afroamericanos son el 12,5 %, y  los asiáticos que son el 4,7 %. La mayoría blanca ha disminuido de un 76,4 % en 2000 a un 66,7 % este año.

PESO CRECIENTE

La influencia latina ha ido creciendo tras cada paso por las urnas, si en 2008 votaron 9,7 millones, en 2012 fueron 11,1 y cuatro años más tarde esa cifra aumentó a 12,6 millones.

Las pasadas elecciones de medio término, celebradas en 2018, la participación latina aumentó en 13 y 9 puntos porcentuales respecto a las de 2014 y 2010, en un hecho que, según analistas, supuso un reflejo del rechazo a las políticas de Trump.

TRES ROSTROS

Por décadas el así llamado «voto latino» tuvo tres rostros de origen y una distribución geográfica definidos: cubanos en Florida, puertorriqueños en Nueva York y mexicanos en el sudoeste.

Pero los orígenes de esta minoría se han diversificado en casi dos décadas de inmigración desde Venezuela, Colombia, Nicaragua, República Dominicana, Guatemala, El Salvador y Honduras, con contingentes menores de Argentina, Brasil, Perú, Bolivia y Ecuador.

El 61,9 % de los latinos son mexicanos, el 9,7 % son puertorriqueños, los cubanos son el 4 %, y los salvadoreños son el 3,9 %, con el resto de procedencia del resto de América Latina y el Caribe.

La propaganda de la campaña de Trump dirigida a los votantes latinos “se sustenta en una manipulación de las emociones, sembrando miedo al ‘comunismo’ lo cual puede tener resonancia para los cubanos, venezolanos y nicaragüenses que han salido de su país escapando de dictaduras”, señaló Mora.

VOTO CRUCIAL

Teniendo en cuenta que la elección presidencial no se decide por el voto directo de los ciudadanos, sino en un Colegio Electoral compuesto por representaciones de los estados, el voto latino puede resultar decisivo en algunos de los estados que aparecen como más disputados en esta campaña, especialmente en Florida, Arizona y Pennsylvania.

“El voto latino es crucial en estados donde las elecciones son reñidas y se deciden por un punto porcentual o menos”, señaló Mora.

Cinco estados albergan a la mayoría de los votantes latinos: California (7,9 millones), Texas (5,6), Florida (3,1), Nueva York (2,0) y Arizona (1,2), y aproximadamente 1 de cada 10 personas elegibles para votar son inmigrantes, según el Centro Pew.

Estas cifras llevan a que los latinos sean más del 25 % de los ciudadanos habilitados para votar en California, Nuevo México, Texas, Florida y Nueva Jersey, y representan entre el 15 % y el 25 % de posibles votantes en Nevada, Arizona, Colorado, Illinois y Nueva York.

Y también son del 10 % al 15 % del electorado en Washington, Oregón, Idaho, Utah, Wyoming, Nebraska, Kansas, Oklahoma, Georgia, Virginia, Maryland, Pensilvania, Connecticut y Massachusetts, según Pew.

Pero las cifras de población no se traducen exactamente en el número de votantes; millones de esos latinos son inmigrantes indocumentados o residentes legales que no han obtenido la ciudadanía. Los partidos han tenido que lidiar con la realidad de que la presencia de latinos en tal o cual región no promete, automáticamente, una cosecha rica de votantes.

Los portavoces y dirigentes comunitarios latinos citan, constantemente, la cifra de 32 millones de hispanos habilitados para votar.

Por décadas, la mayoría de los votantes calificados como latinos ha dado su respaldo al Partido Demócrata, pero los candidatos presidenciales republicanos han obtenido, de manera sostenida, entre un 28 % y un 33 % del voto latino.

Y un incremento o caída de un punto porcentual puede ser vital en unas elecciones que se pueden decidir por unos pocos miles de votos en un puñado de estados, expectativa que impulsó a las campañas de Biden y de Trump a intensificar sus esfuerzos en el último mes por atraer votantes latinos.

En estas elecciones los resultados preliminares, dicen que el voto latino ayudo a ganar a Trump en Florida, mientras que el mismo voto latino, pero de origen mexicano, ayudo a inclinar la balanza en estados como Arizona y Nevada.  Especialmente el de los jóvenes.

Los jóvenes latinos inclinando la balanza

Cada 30 segundos en los Estados Unidos, un joven latino/hispano cumple 18 años. La mayoría son nacidos en Estados Unidos, según el Centro de Investigación Pew; esto representa un estimado de 800,000 nuevos electores/votantes al año. Ellos se unen a otros latinos de la Generación Z (18-24 años) y Milenios (26-40 años) que se consideran un bloque de votación sin explotar que está creciendo más rápido que cualquier otro grupo étnico. Esta población es bilingüe y es más propensa a utilizar la tecnología móvil, según estudios de investigación. Los jóvenes adultos latinos serán el principal impulsor del voto hispano en las próximas dos décadas.

Los latinos han contribuido como ningún otro grupo demográfico a mantener la población joven (por debajo de 18 años) de Estados Unidos en la última década.

El alto número de jóvenes latinos que han cumplido 18 años recientemente ha contribuido de manera significativa con que, por primera vez, 32 millones de personas de origen hispano sean aptas para votar y constituyan el grupo demográfico más numeroso después de los blancos no hispanos.

Logra tu sueño de ser universitario

Virginia Ramírez, reclutadora latina del departamento de admisión del Community College de Filadelfia. Cortesía.

Filadelfia, PA – Cada vez más latinos se están enrolando en la educación superior, y es algo que realmente puede ir mejorando nuestra calidad de vida. En busca de alternativas posibles para seguir estudios universitarios conversamos con Virginia Ramírez, una dominicana que se dedica a servir a la comunidad inmigrante, y se desempeña como reclutadora latina en el Community College de Filadelfia (CCP por sus siglas en inglés).  

El programa Advance College Experiance (ACE), les ofrece a los estudiantes graduados que vengan de cualquier escuela de la ciudad, la opción de inscribirse en el CCP. “Incluso desde el grado 9 los alumnos pueden ir acumulando créditos universitarios, que se colocarán en su record siempre que aprueben el curso”; explicó la entrevistada. De modo que pueden probar sus preferencias dentro de una variedad de cursos, acumulando créditos que podrán transferir a la universidad, ahorrando tiempo y dinero. Si toman un curso cada verano, acumulan 12 créditos que corresponden a un semestre completo. 

Para inscribirse, deben demostrar un índice académico de 2.5 y tener una carta de referencia de alguno de sus maestros. Después de un examen de admisión para medir su nivel en inglés y matemáticas, los estudiantes Junior y Senior (de grados 11 y 12), pueden acceder al Advanced College o Dual Enrollment. Si alcanzan un puntaje a nivel “college”, pueden aplicar a la beca Early Scholar, que cubre sus estudios. Es importante resaltar, dice Virginia, que “todo aquel con más de un año en Filadelfia, por vivir aquí paga la tarifa más baja; hay opciones para todos, sólo necesitan preguntar”.

Para aquellos que por su status legal no califican para la ayuda financiera del gobierno, la ciudad les ofrece la beca CATTO, siempre que demuestren dominio del inglés. Virginia tiene un gran compromiso por la educación, y como madre entiende el alto costo de la educación superior. “Yo, de todo corazón, les digo que el Community College es la alternativa más inteligente para quien no esté becado totalmente y busque a una carrera universitaria, pero evitando las grandes deudas estudiantiles”.

El Community College es la alternativa para lograr en dos años, el grado Asociado, con un promedio de 60 a 65 créditos, de un total de 120 que se exigen para graduarse de Bachiller Universitario. Pero eso no es todo, mencionó Virginia, “si usted puede sacarse estos dos años de su camino sin pagar ni un solo centavo, dígame, ¿va a aprovecharlo?”. En CCP existen las becas PELL y PHEAA, para familias de bajos recursos, que combinadas cubren la matricula, los libros, y todavía les queda un pequeño sobrante que se les da en cheque.

Para adultos que buscan clases de inglés como segundo idioma (ESL), hay un programa específico por niveles. Si busca una certificación para lograr mejor empleo, o simplemente quiere desarrollar una afición, el Community College de Filadelfia ofrece una amplia variedad de alternativas para todos los que están ávidos de conocimiento.

Para más información escriba a Virginia Ramírez, vramirez@ccp.edu.

Las redes logran otro récord publicitario y se erigen en moderador electoral

Foto ilustrativa EFE

Las redes sociales incrementaron aún más su influencia en los comicios generales en EE. UU. este 2020, tanto como receptores de publicidad (las campañas de Trump y Biden se gastaron más de 200 millones de dólares en Facebook) como por su controvertido papel de moderadores de noticias falsas.

Lejos quedan los tiempos de Barack Obama (2009-2017) en que Facebook, Twitter, YouTube e Instagram eran herramientas de exploración para las campañas, que poco a poco iban entendiendo sus potencialidades, a la par que estas trataban de determinar qué papel debían desempeñar en la moderación de contenidos.

En 2020, todos estos debates están ya encarrilados y las tendencias son claras: las redes se han erigido en un sólido receptor de propaganda electoral -aunque, eso sí, todavía a la sombra de la televisión, que sigue reinando- y han aceptado ser jueces de la verdad, aunque ello suponga enemistarse con el mismísimo presidente de EE. UU.

AMBAS CAMPAÑAS SUPERARON LOS 100 MILLONES EN FACEBOOK

Según los datos más recientes del informe publicitario de Facebook -que incluye Instagram, de su propiedad-, la campaña del presidente y aspirante republicano a la reelección, Donald Trump, se gastó en estos comicios 110 millones de dólares, mientras que su rival demócrata, Joe Biden, casi le igualó con 107 millones invertidos.

En comparación, en la última carrera presidencial en 2016, Trump y la entonces aspirante demócrata, Hillary Clinton, tuvieron un gasto total en la red social de 81 millones de dólares, es decir, que entre los dos candidatos hace cuatro años se gastaron menos dinero que Trump y Biden este año de manera individual.

En Google, el otro gran receptor de publicidad en línea en EE. UU. y que incluye el portal de videos YouTube, Biden invirtió en publicidad este año 81 millones de dólares, mientras que Trump se gastó 77 millones, y grupos afines a uno y otro candidato pagaron conjuntamente más de 100 millones adicionales por publicidad.

La excepción a esta tendencia es Twitter, que en octubre del año pasado anunció que prohibía todos los anuncios políticos en la plataforma, un movimiento financieramente arriesgado dirigido a aliviar la presión que estaba recibiendo por parte de activistas y legisladores.

TRUMP, EL MÁS AFECTADO POR LA MODERACIÓN

Es precisamente esta presión, redoblada tras la confirmación por parte del FBI de que hackers rusos influyeron en los comicios de 2016, la que finalmente llevó a Facebook y Twitter a aceptar su papel como moderadores de internet, algo a lo que, especialmente Facebook y su consejero delegado, Mark Zuckerberg, se habían resistido durante años.

A lo largo de la campaña, durante la jornada electoral y muy especialmente en el recuento de los votos, las redes sociales no dudaron en colgar alertas junto a mensajes de candidatos y campañas si consideraban que estos no se ajustaban a la verdad, incitaban a la violencia o podían confundir al público.

El afectado de más relevancia por esta nueva política ha sido Trump, que sólo unas horas vio cómo Twitter escondía parcialmente hasta cuatro de sus tweets o retweets al considerar que estos contenían «información disputada o engañosa sobre la elección», dado que el presidente lanzó acusaciones sin base sobre irregularidades en el recuento.

También Facebook marcó estos comentarios, y ambas compañías tienen fijadas desde la noche de los martes alertas preventivas de que el proceso de recuento sigue en curso y que aún no hay un ganador oficial, para evitar que los candidatos reclamen la victoria antes de tiempo.

LA INDUSTRIA SE VUELCA CON LOS DEMÓCRATAS

El tercer aspecto en el que no sólo las redes sociales, sino el conjunto de las compañías de internet ha aumentado su influencia sobre el proceso electoral son las donaciones a candidatos, que este 2020 han sido las más elevadas jamás registradas en la industria y se han decantado abrumadoramente del lado demócrata.

Así, el cofundador de Facebook y actual consejero delegado de Asana, Dustin Moskovitz, donó 24 millones de dólares a la causa demócrata; el consejero delegado de Netflix, Reed Hastings, otros 5 millones, y el exconsejero delegado de Google Eric Schmidt, otros 6.

Esta apuesta tan escorada al Partido Demócrata (según el Centro para una Política Reactiva, el 98 % de las donaciones vinculadas a empresas de internet fueron a los demócratas) ahondará aún más en los recelos de los republicanos hacia la industria, a la que acusan de sesgada y de atacar sus intereses.

Hacia una agenda boricua

Foto crédito Puertorrican Agenda

Una cosa que nos debe quedar muy clara de la recién pasada contienda presidencial del 2020, es que los puertorriqueños y latinos en general sólo representamos un número. Fue en el último mes de la elección que le dieron un tímido trato a la comunidad boricua y latina. ¿Dónde nos deja eso? Nos deja en una muy interesante disyuntiva. O seguimos la misma pasividad de dejar que manipulen nuestro futuro y progreso, o hacemos una pausa y reflexionamos, en que tenemos que mirarnos en el espejo de nuestra puertorriqueñidad. Tenemos que darnos cuenta de que tenemos que romper con esa falsa expectativa de esperar que hagan por nosotros lo que nosotros podemos hacer por nosotros mismos. Urge que nos sentemos y tengamos una conversación seria entre nosotros para poner los puntos sobre las íes.

Primer punto; como líderes, hemos pasado por alto la educación política de nuestra gente. Por un lado, hemos dejado que los políticos de carrera tengan el control electoral de nuestros barrios. Por el otro lado, nos hemos hecho los de la vista larga, abandonando nuestra responsabilidad civil, no participando en los eventos políticos que dan forma al futuro de nuestros hijos e hijas. Para nosotros, los puertorriqueños y latinoamericanos, la participación electoral no debería ser un asunto ideológico, sino uno de sobrevivencia. La sociedad estadounidense en su discurso de ser una sociedad inclusiva, lo que pretende es absorber las comunidades minoritarias y tornarlas en la continuación de un sueño de progreso, que en realidad es una pesadilla de consumo desenfrenado.

Nosotros tenemos una herencia histórico-cultural tan rica que podríamos ser el catalítico social que necesita nuestra nación para el avance político que necesitamos. Tenemos los números y la pasión para ser esa fuerza, lo que no tenemos son los instrumentos políticos que encaminen esa fuerza hacia comunidades prósperas, económicamente sólidas y con un profundo sentido de participación en los eventos que transformarán nuestras vidas.

Segundo punto; la partidocracia estatal no nos representa y no es el vehículo para nuestro desarrollo social ni económico. Nos urge desarrollar nuevos líderes, con un profundo arraigo en nuestras comunidades. Hombres y mujeres que sepan devolver a sus comunidades el amor y el apoyo que ellos recibieron durante su formación. Si no levantamos nuestros propios líderes y los formamos, estaremos condenados a que los “chulos” de la pobreza, los que usan la necesidad de la gente para aprovecharse de ella, sigan viviendo de nuestras esperanzas.

Tercer punto; las agencias puertorriqueñas sin fines de lucro tendrán que hacer un alto, y pensar que dar servicios sociales sin educar a los que lo reciben, es perpetuar la dependencia y la marginalidad. Hay que enseñarle a nuestra gente a pescar y desarrollarán la virtud de emprender nuevos negocios y proyectos, que encaminen al progreso y al desarrollo económico de nuestros barrios.

Cuarto punto, tenemos que educar a nuestros jóvenes todo lo posible y a tantos como podamos, para que una vez educados no abandonen el barrio, sino para que reinviertan toda esa educación en el futuro de las comunidades que los vieron crecer. Ellos serán nuestros jueces, nuestros líderes de barrio, nuestros gobernadores, nuestros senadores y representantes. Tenemos en nuestras manos un futuro brillante. Dejar que los políticos de carrera sigan secuestrando nuestro progreso es algo que nuestras futuras generaciones no nos perdonarán.

Quinto punto, la diáspora puertorriqueña debería centrarse en buscar una agenda común, en cuanto a la situación colonial de Puerto Rico. Los sondeos que se han hecho sobre la situación política de la Isla muestran un creciente descontento con el tipo de relación que ya, por 122 años, el Congreso ha mantenido. Este asunto no debe ser un tema ideológico, sino un tema de justicia y derechos humanos. Es “vox populi” que Puerto Rico es una colonia, y mientras sea colonia sufrirá las consecuencias de ser víctima de corporaciones extranjeras, que no tienen ningún interés en el bienestar de los puertorriqueños. Es apremiante un proceso descolonizador. Nosotros en la diáspora tenemos la fuerza política para cabildear y romper con el monopolio político que el sector pro-estadista ha tenido sobre el Congreso en los últimos 20 años.

Sexto punto, la comunidad indocumentada tiene que ser parte de nuestra agenda. Esos millares de hermanos y hermanas latinoamericanos tienen en la comunidad boricua un aliado seguro. Un voto para un puertorriqueño es un voto para la reforma migratoria, porque los puertorriqueños somos parte de la comunidad latinoamericana y nuestros indocumentados aportan grandemente al desarrollo económico de nuestras comunidades. Sobre todo a los “Dreamers”, es necesario apoyarles y desarrollar alianzas que eventualmente cambiarán el tablero político.

Séptimo punto, la iglesia deberá abrirse a nuevos enfoques. La iglesia no existe para sí, sino para el mundo. La iglesia es donde nuestra comunidad habita y adora, y debería ser un lugar de encuentro y conversación; pero la iglesia tiene que romper con el sectarismo y abrirse a las preocupaciones e intereses de su comunidad. Si no, estaría huyendo de su responsabilidad bíblica (luz del mundo y sal de la tierra).

Aquí dejo estas sugerencias, a ver si nos sentamos y armamos la agenda.

Puertorriqueños votaron anticipadamente un 30 % más que en 2016

Votantes hacen fila el último día de votación anticipada en Florida, el 1 de noviembre de 2020. (Foto: EFE)

Miami. – Los puertorriqueños registrados en Florida aumentaron el voto anticipado en un 30 % durante estas elecciones generales, con respecto a las de 2016, según indicaron este lunes analistas de la organización de asesoramiento electoral para hispanos Alianza for Progress.

Hasta la fecha, 330.774 puertorriqueños ya han votado por correo o presencialmente temprano, en comparación con los 253.978 que lo hicieron de la misma manera hace cuatro años, un medidor ofrecido hoy durante una rueda de prensa virtual.

En Florida, los puertorriqueños ya superaron a sus compatriotas en Nueva York, con más de 1,3 millones, especialmente en el centro del estado, en los condados Hillsborough, Osceola y Orange, en donde se asienta Orlando.

«Estamos viendo buenos resultados en Florida. Solo hay un 23 % de papeletas corregidas, lo que indica que una de cada cuatro personas ha corregido su papeleta», indicó Rubén Lebron, director político de Alianza for Progress.

En la rueda de prensa, Lebron indicó que, en las próximas horas, tienen previsto hablar con 36.000 votantes puertorriqueños del denominado «estado del sol» que no han ejercido el sufragio de manera temprana.

El objetivo, dijo, es asesorarlos sobre el funcionamiento de los colegios y cómo llegar a ellos en este martes crucial.

«Hay mucho trabajo que hacer», admitió Lebron, al tiempo que recordó que los supervisores electorales, por ley tienen que emitir tres avisos a los votantes en caso de errores en el rellenado de boletas.

«Las elecciones se acaban el 5 de noviembre a las 5 pm, no se acaban mañana», recalcó Lebron.

La organización, que se declara «con una vasta experiencia en el terreno que comprende las idiosincrasias políticas en nuestras comunidades», quiere destacar «el papel pasado por alto que los votantes del NPA están desempeñando en Florida hasta ahora».

Las boletas registradas como NPA corresponden a aquellas personas sin afiliación política que votan como independientes.

«Sabemos que es más probable que los votantes hispanos y puertorriqueños no estén afiliados a ningún partido político con respeto al votante medio de Florida», indicó Alianza for Progress.

«Los votantes del NPA son los héroes olvidados de estas elecciones. Sólo durante la votación anticipada y por correo, sus votos brutos aumentaron un 50 % con respecto al 2016», indicó la organización.

Casi 9 millones de los 14,5 millones de electores registrados en Florida habían ya votado para el lunes, por correo o de manera presencial anticipada.

«Vale la pena hacer una pausa para comprender el cambio trascendental que esto representa para décadas por venir. Los votantes que votan anticipadamente o por correo tienen más probabilidades de convertirse en votantes confiables en elecciones futuras», afirmó en un comunicado Alianza for Progress.

El cambio que necesita un cambio

Fotografía satelital cedida por la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) por vía del Centro Nacional de Huracanes (NHC) donde se muestra la localización del huracán Eta a las 19:10 hora local (00:10 GMT). EFE/ NOAA-NHC

Norristown, PA – El cambio climático ha sido uno de los temas más controversiales en los últimos años. El pasado 13 de octubre, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), declaró que los desastres naturales a causa del clima aumentaron en un 80% desde el año 2001. Esta situación ha preocupado a la mayoría de los gobernantes en todo el mundo, debido a los efectos negativos que ha ocasionado a la humanidad. No obstante, algunos escépticos aún se preguntan si este fenómeno es real o no.

Los cambios climáticos son eventos naturales que ha experimentado el planeta Tierra desde su origen. El clima es el conjunto de condiciones atmosféricas propias de un lugar (lluvia, viento, calor, frío) y, en condiciones normales, depende enteramente de la dinámica de la atmósfera; es decir, la capa de gases que rodea al planeta y que protege la vida de la radiación solar ultravioleta, crea un escudo contra los meteoritos y, al igual que un invernadero, mantiene la humedad y el calor del ambiente.

Los gases que componen la mayor parte de la atmósfera son nitrógeno (78%), oxígeno (21%) y argón (0.95%), indispensables para la vida; y en menor proporción, dióxido de carbono, metano, óxido nitroso y ozono, los cuales se generan naturalmente durante la combustión, por incendios forestales estacionales o por la erupción de los volcanes. Su función es evitar que el calor se pierda al espacio; razón por la cual se conocen como gases de efecto invernadero. Sin embargo, en los últimos 20 años se ha registrado una sobreproducción de estos gases debido a la actividad humana; principalmente por la quema en altísimos volúmenes de carbón, petróleo, gasolina y gas natural.

Cuando la concentración de estos gases aumenta, se forma una “tapa” en la atmósfera, provocando que el planeta retenga más calor del necesario y, por consiguiente, que aumente la temperatura. Este incremento antinatural de calor, de hasta 2°C, conocido como calentamiento global, ha generado el deshielo de los glaciares y un desequilibrio en la circulación del aire de la atmósfera, provocando fenómenos atmosféricos atípicos muy intensos, que cuando afectan los bienes materiales y ponen en peligro la vida humana, son considerados desastres naturales.

La contaminación y destrucción de ecosistemas terrestres y marinos, y la sobrepoblación, son factores que favorecen el calentamiento global y generan problemas de tipo no sólo ambiental, sino social, económico y de salud; por ejemplo: guerra, migración, pobreza, hambre y surgimiento de nuevos agentes patógenos.

Aunque los gobiernos han suscrito varios acuerdos para mitigar los efectos del cambio climático, como el Protocolo de Kyoto y el Acuerdo de París, (en los que EE.UU. no participa desde 2017), éstos no han sido suficientes para disminuir la emisión de carbono. Al respecto, durante la Cumbre sobre la Acción Climática 2019, el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, hizo un llamado para establecer un plan para conseguir que las empresas, los gobiernos y los países alcancen un volumen neto de emisiones de carbono igual a cero para el 2050. Guterres señaló: “Necesitamos más planes concretos, más ambición, más países comprometidos y más negocios. Necesitamos que todas las instituciones financieras, públicas, privadas, elijan de una vez por todas, la economía verde”.

Afectaciones debido al calentamiento global en los últimos 40 años.

AñoNúmero de Desastres naturalesPersonas afectadas (millones)Pérdidas humanas (millones)Pérdidas económicas (USD billones)
2000-20196,6814,2001.232.97
1980-19993,6563,2501.191.63
Datos de la Oficina de la ONU para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR).

A la expectativa de una crisis institucional

Los manifestantes marchan One-Fifth Avenue durante un mitin para garantizar que todas las papeletas se cuenten en las elecciones presidenciales de 2020 en Nueva York, Nueva York, EE. UU., 04 de noviembre de 2020. EFE / EPA / JUSTIN LANE

Tras una noche de «déjà vu» electoral respecto a 2016, al cierre de esta edición aún no estaba claro que el candidato demócrata, Joe Biden, favorito en todas las encuestas, fuera a arrebatar la presidencia a Donald Trump, quien ya se ha apresurado a proclamarse vencedor sin conocer los resultados definitivos. La situación podría empujar al país a una crisis institucional e incluso a conatos de violencia.

El reloj del escrutinio electoral se ralentizó a partir de las 01.00 local del miércoles (06.00 hora GMT), cuando quedaba un puñado de estados clave por conocer, siete territorios de los que pende el futuro de un país alertado por la amenaza de protestas y disturbios por parte de partidarios de uno u otro candidato.

EE. UU. nunca había estado tan dividido frente a unos comicios, y la destrucción del tejido económico y social provocada por la pandemia ha exacerbado las diferencias y ha alimentado la polarización, azuzada por el propio Trump y amplificada por las redes sociales.

POR UN PUÑADO DE ESTADOS

Todas las miradas están fijas ahora en los estados bisagra de Pensilvania, con 20 delegados en el Colegio Electoral; Michigan, con 16; Wisconsin, con 10; Carolina del Norte, con 15; Georgia, con 16; y Nevada, con 6; a los que se suman los 3 compromisarios en juego de Alaska y 1 de Maine.

El Colegio Electoral es un órgano integrado por 538 delegados distribuidos en función de la población de cada uno de los estados. El candidato ganador en cada uno de esos estados, aunque sea por un solo voto, se lleva todos sus compromisarios; y el aspirante que llega a 270 gana las elecciones.

Hasta el cierre de esta edición, Biden aventajaba  a Trump por 265 delegados frente a 214, por lo que las opciones seguían abiertas; porque además Trum hizo claro que pediría recuentos y empezó ya con las demandas.

Si se observa el mapa del país a grandes rasgos, Biden se ha hecho con el triunfo en toda la costa oeste, además de gran parte de la fachada atlántica del país, así como con el estado clave de Arizona, aparte de Colorado, Nuevo México, Illinois y Minnesota.

El mapa se sabe rojo, el color de los republicanos, en áreas del centro y el sur de EE. UU., como Alabama, Arkansas, Iowa, Misisipi, Misuri, Dakota del Norte y Dakota del Sur, entre otros; pero sobre todo han dado alas a Trump los estados bisagra de Ohio, Texas y Florida.

Así que, el mandatario da la pelea a Biden, que daban por hecha la mayor parte de las encuestas, lo que lleva una especie de sensación de lo ya vivido en 2016, cuando los sondeos aventuraban la victoria de la entonces candidata demócrata, Hillary Clinton, que acabó perdiendo.

¿TRUMP VINO PARA QUEDARSE?

Estos resultados inconclusos son un indicador de que Trump ya no es el fenómeno exótico y populista que pudiera parecer hacer cuatro años, y que tiene una base amplia que podría hacer que se quedara en la presidencia por un nuevo mandato.

Queda por ver cómo evoluciona el ánimo en las calles durante los próximos días.

Desde la Casa Blanca y con el recuento aún en marcha, Trump ya denunció este miércoles un «fraude» electoral sin aportar pruebas y amenazó con recurrir al Tribunal Supremo para detener el recuento de votos. Una Corte Suprema, por cierto, cuya mayoría conservadora el presidente ha logrado reforzar antes de los comicios con la ayuda del Senado, controlado por los republicanos, con el nombramiento de la jueza Amy Coney Barrett.

«Iremos al Tribunal Supremo. Queremos que pare todo el proceso de votación», anunció Trump, quien al mismo tiempo aseguró que había ganado las elecciones.

SENSACIONES YA VIVIDAS

Durante la campaña, el mandatario ya había agitado el fantasma de un posible fraude electoral por el voto por correo, que ha sido fundamental en estos comicios debido a la pandemia.

La última vez que el Tribunal Supremo tuvo que resolver una elección presidencial fue en 2000, debido a problemas en el recuento en Florida, y finalmente el republicano George W. Bush se alzó victorioso una vez que el demócrata Al Gore tuvo que tirar la toalla después de que se le negase un nuevo escrutinio.

El tono de Trump contrastó con el de Biden, quien pidió a sus seguidores desde Wilmington (Delaware) que «mantengan la fe» y esperen con paciencia los resultados.

«¡Paren el recuento!», clama Trump mientras Biden pide un conteo exhaustivo

Personal del Departamento de Elecciones del Condado de Miami-Dade organiza votos hoy, en la sede del departamento en El Doral, ciudad aledaña a Miami, Florida (EEUU). EFE/Giorgio Viera

El presidente y candidato republicano, Donald Trump, pidió este jueves en Twitter en letras mayúsculas «¡PAREN EL RECUENTO!», mientras que su rival, el candidato demócrata Joe Biden, reclamó justo lo contrario, que todas las papeletas se cuenten.

Los dos aspirantes se posicionaron en Twitter cuando todas las miradas están en el recuento de votos en Nevada, Pennsylvania, Carolina del Norte, Georgia y Arizona, estado este último donde algunos medios han proyectado una victoria de Biden, pero Trump está acortando distancias.

«¡PAREN EL RECUENTO!», clamó en Twitter el mandatario, quien este jueves no tiene previsto ningún evento público.

Por su parte, el aspirante demócrata escribió en esa misma red social: «todos los votos deben ser contados»; y acompañó su mensaje de un vídeo con el rótulo «cuenten todos los votos» y en el que se ve a dos electores: una mujer blanca y un hombre negro.

Una fuente de la campaña de Biden dijo a Efe que el líder demócrata probablemente volverá a dirigirse al pueblo estadounidense, como ya hizo este miércoles; pero esa fuente no especificó a qué hora se producirá esa comparecencia.

De momento, contando con Arizona, Biden suma ya 264 delegados en el Colegio Electoral, y está a un paso de lograr los 270 compromisarios que le darían las llaves de la Casa Blanca, frente a los 214 que acumula Trump.

La campaña de reelección del presidente, Donald Trump, anunció este jueves la presentación de una querella en los juzgados del estado de Nevada para detener el cómputo de sufragios al asegurar que se están contando «votos ilegales».

Nevada es uno de los estados que todavía no han completado el escrutinio y que podría resultar definitivo para elegir al nuevo presidente. Según las proyecciones de los medios estadounidenses, con el 86 % de los votos contabilizados, el demócrata Joe Biden aventaja a Trump por menos de un punto porcentual.

El estado de Nevada, donde el recuento muestra a Biden a la cabeza, dará a conocer nuevos resultados hoy a las 9 am hora local (12 EST), mientras que las autoridades del condado de Maricopa, el más poblado de Arizona, no tiene previsto ofrecer nuevos datos hasta las 7 pm hora local (9 pm ET).

Entretanto, en la calle ha ido tomando fuerza un movimiento denominado «Cada voto cuenta», destinado a presionar para que se tengan en cuenta todos los sufragios enviados por correo.

Frente a ello, simpatizantes de Trump han acudido a centros de votación de algunos estados para pedir que se dejen de contar las papeletas.