Varias personas se manifiestan durante una vigilia frente al centro comercial Ágora Mall, 3 de mayo, en Santo Domingo (República Dominicana). (Foto: EFE/Orlando Barría)

Decenas de personas se en Santo Domingo para solicitar a las autoridades el esclarecimiento de la muerte, el domingo pasado, de un hombre de 24 años que cuatro días antes fue detenido por la Policía Nacional en un centro comercial de la capital. Familiares y amigos de David de los Santos protestaron frente a una céntrica plaza comercial de la capital dominicana donde fue apresado el joven, luego de que sostuviera un altercado con una mujer.

La mayoría de quienes reclaman el esclarecimiento del suceso vestían de negro y varios sostenían velas encendidas y otros carteles condenando la muerte de De los Santos.

«Estamos aquí para exhibir que este caso no quede impune como otros tantos en este país, principalmente cuando están envueltos los organismos castrenses, cuyos miembros simplemente los trasladan de lugar para solapar lo sucedido y evadir la presión social», dijo a Efe Nairobi Pérez Ramírez, amigo del fallecido.

Pérez afirmó conocer a De los Santos desde la «infancia» y rechazó de plano las versiones de que este se produjo los golpes que le causaron la muerte.

«David era un joven sin problemas mentales como se ha querido decir. Hace apenas una semana compartimos por última vez en un gimnasio. Él trabajaba en un centro de llamadas, dominaba bien el inglés y de eso vivía», agregó Pérez Ramírez, al asegurar que De los Santos residía en el municipio de Los Alcarrizos, provincia Santo Domingo.

La muerte del joven ha causado gran indignación en la sociedad dominicana, donde el propio presidente del país, Luis Abinader, condenó el suceso, así como el ministro de Interior y Policía, Jesús Vásquez.

La Policía Nacional afirmó que el joven se autolesionó en el destacamento en el que estaba detenido, pero el certificado de defunción entregado por el Ministerio de Salud Pública a sus familiares, dado a conocer por algunos medios, establece de manera preliminar que se trató de un homicidio a causa de un trauma craneoencefálico.

La procuradora general, Miriam Germán Brito, instruyó a la Dirección General de Persecución del Ministerio Público para que coordine una investigación de los casos de ciudadanos que han perdido la vida después de estar retenidos en cuarteles policiales.

El Ministerio Público anunció que el deceso del joven se investiga como un homicidio, mientras que la Policía Nacional dispuso la suspensión de los agentes del destacamento donde estuvo el detenido mientras siguen las pesquisas sobre el caso.

Anteriormente, murieron también bajo custodia policial José Gregorio Custodio, de 37 años, el 17 de abril, y Richard Báez, de 30 años, el 5 día de ese mismo mes, según denuncias de sus familiares.

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