El director general de Tesla y SpaceX, Elon Musk, habla en la conferencia y exposición SATELLITE en Washington, 16 de diciembre de 2022. (Foto: AP/Susan Walsh/File)
Millones de usuarios de Twitter pidieron a Elon Musk que renuncie como jefe de la red social, en una encuesta en la plataforma creada por el multimillonario y que este había prometido acatar.
Sin embargo, cuando concluyó la encuesta el lunes, no estaba claro si habría un nuevo líder para la red social, que se ha vuelto más caótica y confusa bajo la conducción de Musk, con medidas rápidamente emitidas y luego retiradas o alteradas por él.
Musk asistió a la final de la Copa del Mundo en Qatar, donde abrió la encuesta. Tras cerrarla 12 horas después, no hubo declaraciones inmediatas de Twitter o de Musk, quien podría encontrarse volando de regreso a Estados Unidos el lunes por la mañana.
Más de la mitad de los 17,5 millones que participaron de la encuesta respondieron “sí” a la pregunta de si Musk debe renunciar como jefe de la empresa.
Musk ha realizado una serie de sondeos sin rigor científico sobre asuntos importantes para la red social, como si debería rescindir la suspensión de las cuentas de periodistas, medida que recibió críticas generalizadas dentro y fuera del ámbito de los medios.
Las encuestas han incrementado la sensación de alboroto en Twitter desde que Musk adquirió la empresa por 44.000 millones de dólares a fines de octubre y posiblemente dejó la conducción en manos de sus usuarios.
Entre esos usuarios hay personas a las que Musk permitió que regresaran luego de haber sido vedadas por difundir racismo, odio y desinformación.
Desde que compró Twitter, Musk ha presidido una serie vertiginosa de cambios que han enervado a las empresas de publicidad y disgustado a los usuarios. Ha despedido a la mitad del personal, anulado los contratos de moderadores de contenido y disuelto un consejo de asesores en materia de confianza y seguridad. Ha dejado de aplicar las normas que prohíben difundir desinformación sobre el COVID-19 y ha pedido que se inicie una demanda criminal contra el doctor Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas del país y uno de los conductores de la respuesta al coronavirus.
Hinchas argentinos festejan frente al Obelisco de Buenos Aires la victoria de la selección de su país sobre Croacia en las semifinales del Mundial, el martes 13 de diciembre de 2022 (AP Foto/Víctor R. Caivano)
Buenos Aires, Argentina- Las calles explotan, la gente abandona sus autos y los deja estacionados en cualquier parte, como si escaparan del fuego del fin del mundo. Suenan las bocinas, vuelan petardos y papeles al aire; explotan los sentimientos, las emociones contenidas, las broncas por las injusticias a la que estamos sometidos permanentemente quienes vivimos en este suelo que tiene muy pocos motivos para estar alegre y festejar.
Es la fiesta de todos los que no llegan a fin de mes, de los que sufren por la inflación, de los que estamos cansados de los políticos que piensan solamente en ellos
Euforia con gritos desencajados, con familias enteras vestidas de celeste y blanco, con abrazos apasionados con cualquiera. En la fiesta de todos se unieron clases sociales, amigos espontáneos, conocidos de hace un rato, el cartonero que recogía esperanzas de vida, y hasta miembros de la policía con los ojos llenos de lágrimas y con las ganas de festejar contenidas en su uniforme.
Hinchas argentinos trepan a un poste en Buenos Aires durante los festejos por la coronación en la Copa del Mundo, el domingo 18 de diciembre de 2022 (Foto: AP/Matilde Campodonico)
Hubo venezolanos, ecuatorianos, hondureños, japoneses, peruanos, bolivianos y de todas partes del mundo; muchos de ellos con las camisetas argentinas en su pecho. Un crisol de razas que no se quiso quedar afuera de semejante festejo. Si hasta los típicos vendedores senegaleses recogieron sus mantas llenas de baratijas para abrazarse con cualquiera que tuvieran al lado.
Gorros, banderas, vinchas, serpentinas, cornetas y cualquier cosa que tuviera los colores y que sirviera para guardar el recuerdo en las cabezas de la abuela, que tal vez no vuelva a ver otra manifestación semejante; y también la de los chicos con la camiseta “trucha” con el nombre del mejor jugador de la historia (¿Título compartido con Maradona?). Todas las camisetas dicen “Messi” y las estrofas de los cantos inventados en el momento tienen a Messi y las risas convertidas en llanto también dicen Messi.
El delantero argentino Lionel Messi canta el himno previo a la final de la Copa Mundial entre Argentina y Francia en el estadio Lusail el domingo 18 de diciembre de 2022, en el Lusail, Qatar. (Foto: AP/Manu Fernández)
En un segundo plano está el resto de los gladiadores, todos en un podio compartido y a la misma altura. No importó si jugaron algunos minutos o si tuvieron un contrato imaginario de alquiler con el banco de los suplentes, porque si hubo algo que caracterizó a este grupo, fue la unidad y el compañerismo, en cada entrenamiento, en cada partido (jugando o alentando), en cada cena y en aquel momento de decepción después del debut con derrota, y con presagio de final de ciclo.
Las imágenes de la televisión mostraban en pantallas gigantes distintos festejos en el resto del país, desde Ushuaia hasta La Quiaca. Miles de kilómetros vestidos de celeste y blanco; decenas de motivos, cientos de emociones, millones de lágrimas.
Se sabe acabadamente que el fútbol es la pasión de las multitudes y eso y no otra cosa, quedó certificado en cada una de las calles argentinas que ayer explotaron de alegría y pasión por el triunfo de la selección nacional en el campeonato Mundial jugado en las lejanas tierras qataríes.
Hinchas argentinos festejan en Buenos Aires tras la coronación en la final de la Copa del Mundo, el domingo 18 de diciembre de 2022 (Foto: AP/Gustavo Garello)
El Director Técnico de la selección derrotada de Francia, Didier Deschamps dijo “Ellos estaban jugando la final del mundo”. Agregó que los 47 millones de habitantes de este bendito país, también…
Ryan Cummins camina con su perro en una calle de Pittsfield, Massachusetts, el viernes 16 de diciembre de 2022. (Ben Garver/The Berkshire Eagle via AP)
Las previsiones para los días previos a la Navidad deberían ser más precisas a medida que se acercan las fechas; pero hasta ahora los pronósticos indican que se avecina un poderoso sistema meteorológico, que amenazaría la región y podría golpear alrededor del día de Navidad, dependiendo de su trayectoria y poder.
Es probable que la tormenta golpee el área metropolitana de Filadelfia el jueves y el viernes. Aún no se conoce un momento más exacto.
Los expertos siguen sin estar seguros, pero es posible que haya fuertes lluvias, vientos y nieve en la región, dijo el Servicio Meteorológico Nacional, lo que complica los planes de los viajeros. Es probable que la tormenta afecte a gran parte de la nación.
AccuWeather actualmente considera que el «riesgo de demora de viaje» para el área de Filadelfia es alto. Los caminos obviamente serán peligrosos.
Los vuelos, incluidos los aeropuertos que están fuera de las principales zonas objetivo de la tormenta, se prevén retrasos por efecto en cascada que impacta el retraso y cancelaciones de otros vuelos.
Jon Porter, meteorólogo y jefe de AccuWeather, declaró que,»Las principales tormentas de la costa este durante décadas, han ocurrido en este tipo de configuración, lo que genera el riesgo de fuertes nevadas y lluvias, con ráfagas de viento, inundaciones costeras, tormentas eléctricas severas e incluso tornados en el lado sur de la tormenta».
«Por ahora, sería prudente que la mayor parte de nuestra región se preparara para al menos algo de nieve, ráfagas de viento, junto con otra ronda de inundaciones costeras y quizás también fuertes lluvias», dijeron los meteorólogos en la oficina de Mount Holly, que cubre todo de Nueva Jersey, excepto la parte noreste.
Como esta Navidad podría ser la más fría en décadas, se recomienda a quien vaya a estar fuera de su casa, que tomen precauciones para evitar que se congelen las tuberías.
El presidente de EEUU, Joe Biden, se reúne con el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, en la oficina oval de la Casa Blanca en Washington, DC, el 19 de diciembre de 2022. (Foto: Brendan Smialowski /AFP)
Los presidentes de Ecuador y EEUU se reunieron este el lunes, como parte de una visita de Lasso a Washington centrada en temas clave como seguridad, migración, medio ambiente y comercio.
Casa Blanca. — La crisis migratoria provocada por la grave situación humanitaria que vive Venezuela acaparó el lunes la reunión bilateral de una hora que el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, sostuvo con su par de Estados Unidos, Joe Biden, en la Casa Blanca.
A la salida de la reunión, el presidente Lasso dijo a reporteros: «Hemos hablado de migración y la migración como consecuencia de los problemas de la economía en muchos países de América Latina (…) hemos reiterado nuestro compromiso de seguir apoyando como lo hemos hecho al fenómeno migratorio, especialmente de Venezuela en Ecuador».
Lasso calificó de “muy cercana” y fructífera la reunión con Biden.
El presidente ecuatoriano agregó que los temas de la libertad, seguridad y los derechos humanos en la región también fueron parte de los intercambios. En especial, Lasso expuso al mandatario estadounidense “la situación de violencia que se ha vivido en nuestro país producto del narcotráfico, el crimen organizado y bandas transnacionales”.
Lasso recordó a la prensa que Ecuador fue uno de los primeros en la región en oponerse a la invasión de Ucrania por parte de Rusia.
“Fuimos el primer país de América Latina que condenó el ataque ruso a Ucrania. Creemos en el multilateralismo, creemos en el estado de derecho internacional, creemos que el diálogo es la mejor fórmula para resolver las diferencias”, aseveró.
Los presidentes de Ecuador y EEUU se reunieron este el lunes, como parte de una visita de Lasso a Washington, centrada en temas clave como seguridad, migración, medio ambiente y comercio.
Un funcionario de alto rango de la Casa Blanca había adelantando antes de la reunión a la Voz de América que ambos líderes se centrarían en el tema de Inmigración como parte importante de su diálogo.
«[Ecuador está] ‘dando un ejemplo importante’ sobre manejo de inmigración regional», dijo la fuente. Además indicó que ambos mandatarios darán seguimiento a Declaración de Los Ángeles sobre migración regional.
El número de ecuatorianos llegando a la frontera sur de EEUU ha aumentado considerablemente. De alrededor 748 migrantes que llegaron en octubre de 2021 hasta aproxidamente 7.000 en octubre 2022, según datos de CBP. Ecuador no solo envía migrantes, sino que también se ha convertido en ruta de migrantes, sobre todo haitianos.
Esta es la segunda vez que ambos líderes se encuentran. La primera vez fue durante la Cumbre de las Américas, que se celebró en junio en Los Ángeles.
El domingo, Lasso dijo a medios que entre sus prioridades está mejorar la cooperación de seguridad con Estados Unidos para combatir a los carteles del narcotráfico que han provocado un aumento de la violencia.
También explicó que cumplirá con «una agenda de trabajo para posicionar al Ecuador como un país que respeta la democracia con independencia de poderes, resaltando la importancia de la cooperación internacional en seguridad y el trabajo conjunto entre naciones».
Las autoridades ecuatorianas están buscando fondos de al menos 5.000 millones de dólares para hacer frente a la violencia en los próximos tres años.
Ecuador acompaña a Colombia y Perú en la lista de los tres mayores productores de cocaína del mundo. A menudo, grupos criminales utilizan a Ecuador como trampolín de la droga que ingresa a EEUU y Europa, de acuerdo con el más reciente Informe Mundial de las Drogas publicado por la ONU.
Antes de salir de Ecuador, Lasso dijo el domingo que el comercio es otro tema central durante su reunión con Biden. Ecuador es el único país del Pacífico latinoamericano sin acuerdo de libre comercio con EEUU, y Lasso tiene el objetivo de conseguirlo para algunas de sus principales producciones: banano, camarón, atún y flores.
Otras reuniones en Washington
Lasso tiene previsto también reunirse el lunes con el secretario general de la OEA, Luis Almagro, asistirá al consejo permanente del organismo en la tarde y luego se reunirá con Samantha Powell, la administradora de la Agencia de Cooperación Internacional de EEUU (USAID).
El martes Lasso tiene una reunión con el director de la CIA, Williams Burns, y participará en una conferencia en el centro de estudios Willson Center.
En la tarde del martes se reunirá con el presidente del Banco Mundial, el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo y con líderes del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de EEUU.
Lionel Messi besa la Copa del Mundo que conquistó con Argentina el domingo 18 de diciembre en Lusail, Qatar, tras imponerse por penales a Francia (Foto: AP/Hassan Ammar)
Doha, Catar. — La larga espera de Lionel Messi para conquistar una Copa del Mundo terminó, quizá tras la final más memorable en la historia.
Messi lució en su nivel máximo de inspiración, al aportar dos goles para elevar a siete su total en Qatar y para que la Albiceleste se coronara campeona mundial por tercera ocasión en la historia, al imponerse 4-2 sobre Francia por penales, necesarios a raíz del empate 3-3 tras la prórroga.
Kylian Mbappé se encargó de complicarle al máximo la misión a su compañero del París Saint-Germain, al conseguir un triplete, incluidos dos tantos en 97 segundos durante el ocaso del tiempo regular, para que Francia se recuperara de un déficit de 2-0.
El delantero francés igualó el marcador de nuevo en el alargue, cuando Messi había devuelto la ventaja a la selección argentina.
Al final, llegó el turno de Messi para levantar el trofeo que más ansiaba.
Tras satisfacer la ambición de toda su vida, ¿qué sigue para el astro y para Argentina?
EXPECTATIVA VS. REALIDAD
Con Messi en el equipo, Argentina siempre ha estado entre las selecciones favoritas. Pero a los 35 años y en las últimas etapas de su laureada carrera, el delantero lucía con menos recursos que en los años previos para guiar a su país al éxito. Y cuando Arabia Saudí dio una de las grandes sorpresas en los 92 años de historia mundialista al imponerse 2-1 sobre Argentina en la fase de grupos, la posibilidad de una eliminación temprana lució demasiado cercana.
Messi inspiró al equipo a fin de que se recuperara de ese tropiezo, y ofreció una de las mejores actuaciones en la historia de estos torneos, con siete goles y tres asistencias. Aunque las expectativas de Argentina no habrían estado en su mayor nivel nivel histórico para este Mundial, Messi cumplió de sobra con éstas y con una de las misiones máximas en su carrera, al conseguir el mayor premio del fútbol.
¿QUIÉN SE MARCHA?
Messi ha dicho que seguirá por un tiempo. Pero esperar que dispute otro Mundial sería mucho pedir. Ángel di María tiene 34 años y a comienzos de 2022 manifestó que se retiraría de la Albiceleste tras la cita en Qatar.
Nicolás Otamendi tiene también 34 años y difícilmente estará en el plantel dentro de cuatro años, cuando Argentina busque revalidar su título. El técnico Lionel Scaloni seguramente ha ganado admiradores en clubes prestigiosos tras ganar la Copa del Mundo a una edad relativamente temprana, 44 años.
¿QUIÉN VIENE?
Pese a que Messi ha sido la inspiración para Argentina, el título llegó también gracias a un talentoso plantel donde hay jóvenes que no alcanzan todavía su plenitud. El caso más notable es el del delantero Julián Álvarez, de 22 años, quien marcó cuatro tantos para convertirse en el nuevo atacante estelar de su país.
El mediocampista Enzo Fernández, de 21 años, fue nombrado el mejor jugador joven del Mundial y se le vincula con clubes de altos vuelos, pese a que firmó recién con Benfica. Los defensas Cristian Romero y Nahuel Molina tienen 24 años, mientras que el volante Alexis Mac Allister tiene 23. Sacaloni tiene una buena base para construir al siguiente equipo.
¿QUÉ SIGUE?
Está por verse si la eliminatoria para el próximo Mundial comenzará en marzo, como se llegó a plantear. Lo que sí es seguro es que Argentina buscará refrendar su cetro de la Copa América en la edición de 2024.
Fotografía de archivo en la que se registró al beisbolista dominicano Nelson Cruz (d) al actuar para el seleccionado de su país, durante un partido del Clásico Mundial de Béisbol de 2013, en Miami (Florida, EE.UU.). (Foto: EFE/Rhona Wise)
Santo Domingo, República Dominicana.- Los estelares Nelson Cruz, Juan Soto, Eloy Jiménez, Jorge Polanco y Wander Franco, encabezaron a un grupo de jugadores dominicanos de las Grandes Ligas, que este domingo impartieron clínicas de béisbol a niños en el estadio Quisqueya Juan Marichal de Santo Domingo.
«Es algo sin precedentes. Queremos que esto pueda trascender y que de una manera u otra podamos darle algo a los niños que van a ser el futuro de nosotros en las Grandes Ligas y en la sociedad», dijo Cruz, gerente general del equipo dominicano para el Clásico Mundial sobre la actividad denominada «Soy Grandes Ligas Desde Pequeño».
La actividad que se realizó en coordinación con la Federación Dominicana de Béisbol y MLB, reunió a más de 2.000 niños de entre 8 y 12 años, en el estadio de la capital dominicana, donde fueron orientados por los jugadores que son su modelo a seguir.
“Me sentí muy emocionado cuando esos niños me vieron entrar al terreno y mencionaron mi nombre. Fue un momento muy bonito para mí, y espero volver ayudar a los niños de mi país”, expresó Soto, quien fue uno de los jugadores más aclamado por los niños que estuvieron presentes.
“Es algo muy bonito estar aquí viendo la juventud, porque una vez estuve ahí y tuve la oportunidad de compartir con algunos entrenadores y algunos jugadores de las Grandes Ligas y fue muy bonita la experiencia”, dijo Jiménez sobre la relevancia de este tipo de actividad con los niños.
“Es un placer estar compartiendo aquí con los niños, que son el mañana y este es un país que es lleno de béisbol, donde salen los niños con energía y que siempre le gusta la pelota y uno se siente súper orgulloso de estar aquí y verlos a ellos”, indicó Franco sobre su experiencia al compartir con los infantes provenientes de las ligas de Santo Domingo, el sur y el este país.
Entre los jugadores que asistieron a esta formación para los niños, también estuvieron José Siri, Diego Castillo, Félix Bautista, Jorge Mateo, Génesis Cabrera y Camilo Doval.
También estuvo presente el dirigente del equipo dominicano para el Clásico Mundial de Béisbol, Rodney Linares, los coaches Wellington Cepeda, Ramón Santiago, José Canó, Carlos Febles, Manny García y Fran Valdez.
Omar Minaya, asistente especial de Cruz en la gerencia del conjunto dominicano, acompañó al presidente de la Fedobe, Juan Núñez en esta actividad.
La siguiente clínica “Soy Grandes Ligas Desde Pequeño”, dirigida a niños de la zona norte del país, será celebrada el 8 de enero, en el estadio Cibao de Santiago.
Ciudad de México.- La balanza comercial agroalimentaria de México registró un superávit de 5.077 millones de dólares en los primeros 10 meses de 2022, informó la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) de México.
El superávit observado entre enero y octubre de este año fue el quinto mayor saldo positivo en 28 años, en términos monetarios, según cifras del Banco de México (Banxico).
En este mismo periodo, las ventas agroalimentarias al exterior rompieron récord, al sumar 41.602 millones de dólares, lo que significó un aumento de 13,88 %, en comparación con los 36.532 millones de dólares en el mismo periodo del año previo.
Este mismo volumen se acercan a la cifra total de ventas registrada en todo 2021, cuando ingresaron 44.687 millones de dólares pro productos agropecuarios y agroindustriales.
La Sader detalló que las importaciones agropecuarias totalizaron 36.525 millones de dólares en los primeros 10 meses del año.
La dependencia mexicana señaló que, si bien las importaciones registraron crecimiento a octubre pasado, “se ubican por debajo del nivel de las exportaciones, con lo cual la balanza se mantiene superavitaria”.
“Así, el comercio agroalimentario de México con el mundo sumó 78.127 millones de dólares en el periodo enero-octubre, donde el 53,2 % correspondió a las ventas de nuestro país (México) a sus socios comerciales”, detalló la Sader en un comunicado.
En contraste, la Secretaría de Agricultura de México indicó que solo la balanza agropecuaria y pesquera presentó un déficit por 208 millones de dólares.
Esto, como resultado de un total de exportaciones por 17.541 millones de dólares y compras al exterior por 17.749 millones de dólares.
En tanto, refirió que la balanza agroindustrial tuvo un superávit por 5.285 millones de dólares, al registrar ventas al exterior por 24.061 millones de dólares e importaciones por 18.776 millones de dólares.
En este sentido, las bebidas, frutas y hortalizas fueron los principales grupos de exportación al concentrar el 60 % del comercio exterior agroalimentario, con el 24,18 y 18 % de participación, respectivamente, en los primeros 10 meses del año.
Los productos con mayores incrementos en sus exportaciones fueron del trigo y morcajo con aumentos de más del 175 %, seguidos por el cacao en grano (149,8 %); café sin tostar y sin descafeinar (86,99 %); azúcar (52,32 %); preparaciones de café, té o yerba mate (47,55 %) y aceite de girasol, cártamo, algodón (41,47 %).
A su vez, dio a conocer que los productos agroalimentarios mexicanos con el mayor valor de exportación fueron: cerveza, tequila y mezcal, aguacate, jitomate y productos de panadería.
En el caso de las importaciones hacia México, el 57 por ciento de las compras desde el exterior se concentraron en cuatro grupos: cereales, semillas y frutos oleaginosos, cárnicos y lácteos, huevos y miel.
Aficionados de la selección nacional argentina de fútbol fueron registrados este domingo, 18 de diciembre, al celebrar el título del equipo surameriano en el Mundial FIFA de Qatar 2022, en Nueva York (NY, EE.UU.). (Foto: EFE/Peter Foley)
Chicago, EE. UU.- Los medios estadounidenses celebran este domingo, en sus portadas digitales, el tercer título mundialista de Argentina y el primero de Lionel Messi, que coronó su carrera con una Copa del Mundo tras anotar un doblete en la final ganada en la tanda de penaltis contra Francia en Qatar.
«Messi reclama su corona», asegura el ‘New York Times’ en su portada digital, en la que define la final como una de las mejores en la historia de la Copa del Mundo.
«Para Messi y Argentina la espera extra mereció la pena», considera el diario neoyorquino en otro artículo.
Según el ‘Washington Post’, Messi «agregó la última pieza de gloria a su extraordinaria carrera» y puso fin, con su doblete y su diana en la tanda de penaltis, a una espera que duraba desde 1986.
La tercera corona mundial de Argentina se celebra también en ‘The Wall Street Journal’, que considera que Messi «levantó por fin el gran trofeo que se le escapaba», algo que le permite reforzar su lucha por ser el más grande de siempre.
Este diario celebra además al «otro Lionel», al referirse al técnico Scaloni, quien emuló a César Luis Menotti, ganador en 1978, y Carlos Bilardo, vencedor en 1986, como los únicos técnicos campeones del torneo con Argentina.
«Una final para la historia corona la gloriosa carrera de Messi», se lee en la página digital de la cadena ‘ESPN’, que abre además un debate sobre si Messi se puede considerar el mejor de siempre en el deporte masculino.
Argentina firmó este domingo su tercera estrella, tras los mundiales de 1978 y 1986, después de ganar en la final a Francia en la tanda de penaltis tras el empate 3-3 en el tiempo reglamentario.
Una multitud ocupa la plaza donde se ubica el Obelisco en Buenos Aires para festejar la coronación de Argentina en el Mundial de Qatar, el domingo 18 de diciembre de 2022. (Foto: AP/Rodrigo Abd)
Buenos Aires, Argentina. — Luego de sufrir lo indecible hasta el último momento, los argentinos dieron rienda suelta a una desbordante alegría el domingo, con el triunfo épico de su selección nacional ante la de Francia por penales en la final de la Copa del Mundo en Qatar.
Por fin, Argentina se alzó con el tercer título de su historia en la Copa del Mundo, luego de imponerse 4-2 en la tanda. La coronación anterior se remontaba a 1986, en México.
En la tierra donde el fútbol es la mayor pasión, millones de argentinos lloraron, gritaron y se fundieron en interminables abrazos en sus casas, en bares y en plazas de decenas de ciudades en las que se congregaron para ver la final de infarto en grandes pantallas, sintiendo que tocaban el cielo con las manos en algunos momentos o que todas las ilusiones se derrumbaban en otros.
Argentina dilapidó una ventaja de 2-0 en el tiempo regular. Recuperó la delantera en la prórroga, pero el tercer gol del astro francés Kylian Mbappé en el encuentro obligó a definir desde los 11 pasos.
Gonzalo Montiel convirtió el penal decisivo en la tanda tras el empate 3-3 al cabo de 120 minutos de lo que fue quizá la final más electrizante de la historia.
Hinchas argentinos festejan en Buenos Aires tras la coronación en la final de la Copa del Mundo, el domingo 18 de diciembre de 2022 (Foto: AP/Gustavo Garello)
“Estoy muy feliz, lo merecíamos de verdad, este equipo sufrió bastante, pero se fue reponiendo”, dijo a The Associated Press Josefina Villalba, de 55 años. La mujer, ataviada con los colores celeste y blanco de Argentina, era una de las fanáticas que se había acercado a una plaza capitalina para ver la final.
Tras esperar 36 largos años, la Albiceleste se alzó de nuevo con el cetro mundialista borrando de un plumazo los sinsabores económicos de los últimos tiempos. El primer título lo había logrado en 1978, pero había perdido las finales de 1930, 1990 y 2014 —esta última ya con Lionel Messi como su astro.
La elogiada actuación de la selección a lo largo del Mundial de Qatar unió a la población con una alegría poco común en un país afectado desde hace años por una de las peores tasas de inflación del mundo y por una creciente pobreza.
Hinchas argentinos trepan a un poste en Buenos Aires durante los festejos por la coronación en la Copa del Mundo, el domingo 18 de diciembre de 2022 (Foto: AP/Matilde Campodonico)
El presidente argentino Alberto Fernández felicitó en su cuenta de Twitter al plantel dirigido por Lionel Scaloni.
“Son el ejemplo de que no debemos bajar los brazos. Que tenemos un gran pueblo y un gran futuro», manifestó.
Fernández también agradeció las palabras de elogio del presidente electo de Brasil, Luiz Inácio “Lula” Da Silva, sobre el “gran juego” de Messi y Ángel Di María, al señalar que «si gana Argentina gana Latinoamérica”.
El presidente Chileno Gabriel Boric, quien en Twitter había alentado a la selección del país vecino cuando se decidía la suerte del partido, mandó un “abrazo gigante a los hermanos argentinos” y afirmó que “su alegría cruza la Cordillera” de los Andes tras el final del encuentro.
La Albiceleste puso fin a 20 años de hegemonía europea en mundiales.
El recuerdo del fallecido astro del fútbol argentino Diego Maradona, que alzó la Copa del Mundo en el Estadio Azteca en 1986, sobrevoló durante todo el certamen. Este fue el primer Mundial disputado desde que Maradona falleció, el 25 de noviembre de 2020.
Tras la victoria argentina, su nombre también estuvo en boca de Pelé, desde el hospital donde se encuentra, aquejado de un cáncer. Durante décadas, Maradona y Pelé han sido adversarios en el debate sobre quién ha sido el mejor futbolista de la historia.
Hinchas argentinos en Buenos Aires celebran el primer tanto de la selección de su país en la final mundialista ante Francia, el domingo 18 de diciembre de 2022 (Foto: AP/Rodrigo Abd)
«¡Enhorabuena Argentina! Seguro que Diego sonríe ahora», dijo la estrella brasileña en su cuenta de Instagram.
Pelé, de 82 años, elogió a Messi por haber ganado su primer mundial “como se merecía por su trayectoria” y también mencionó con admiración a su “querido amigo” Mbappé, quien además del triplete convirtió un penal en la tanda.
Hubo más de un seguidor de la selección argentina que se mostró convencido de que Maradona fue el artífice del triunfo.
“El Diego está mirando todo desde el cielo; no iba a querer que Argentina pierda. ¡El primer Mundial sin él y lo ganamos! Diego está presente siempre, Diego eterno”, dijo Javier López, de 18 años, uno de los congregados en la plaza capitalina que llevaba puesta una camiseta de Argentina con el nombre de la leyenda del fútbol
Facundo Alonso, de 26 años, dijo que el plantel dirigido por Lionel Scaloni “transmite algo muy distinto a los planteles de antes, que no sentían la camiseta, mientras que estos jugadores dejan todo en cada partido, ponen todo».
Bajo un sol deslumbrante, López y Alonso se unieron poco después a decenas de miles de personas que celebraron en la plaza de Buenos Aires donde se alza el monumento del Obelisco.
Muchas de ellas habían viajado en metro hasta ese céntrico lugar en vagones colmados donde coreaban la canción “Muchachos”, que se ha hecho famosa entre la hinchada argentina de Qatar en este mundial y hace alusión a las ganas de hacerse con el trofeo mundial.
“Muchachos, ahora nos volvimos a ilusionar, quiero ganar la tercera, quiero ser campeón mundial”, cantaban a voz en grito los pasajeros mientras daban saltos.
En la plaza donde se encuentra el Obelisco, la canción volvió a escucharse, lo mismo que el nombre de Messi, el capitán de la selección argentina, quien marcó un tanto en el tiempo regular, uno en la prórroga y un penal en la tanda.
Familias integradas por padres que llevaban a sus hijos en hombros y portaban la bandera argentina celebraron hasta el cansancio. Ancianos, algunos trasladados en sillas de ruedas, también se sumaron al festejo en el que los participantes tocaron cornetas y tambores.
Las calles de otras ciudades argentinas se colmaron de personas. Muchas armaban círculos para celebrar, otras se trasladaban en autos adornados con la bandera argentina mientras tocaban la bocina para celebrar el triunfo. De los balcones de las casas también colgaban banderas del país.
En Rosario, ciudad natal de Messi y de Di María situada a unos 300 kilómetros al norte de la capital, el Monumento Nacional a la Bandera —símbolo de la ciudad y el epicentro de todos los festejos— colapsó de gente. Se calcula que no menos de 300.000 personas pasaron por ese lugar.
“Argentina merecía esta alegría. Más allá de todo lo malo que está pasando en el país, Di María se lo regaló, Messi se lo regaló. Soy el pibe más feliz del mundo”, dijo Rodrigo Medina, de 21 años, quien se encontraba entre los congregados.
Jeremías Regolo, de 26, señaló por su parte que los festejos que presenció fueron una locura.
«Superó mis expectativas. Con tanta gente en la misma sintonía. Todos festejando. Eso es lo más lindo”, sostuvo.
La expectación para el encuentro del domingo era incluso mayor que en el certamen de hace ocho años en Brasil, cuando llegó la derrota ante Alemania en tiempo extra.
Argentina's Lionel Messi lifts the trophy after winning the World Cup final soccer match between Argentina and France at the Lusail Stadium in Lusail, Qatar, Sunday, Dec. 18, 2022. Argentina won 4-2 in a penalty shootout after the match ended tied 3-3. (Photo: ap/Martin Meissner)
Lusail, Qatar.— Lionel Messi, wearing a black Qatari robe over his blue-and-white Argentina shirt, kissed the World Cup, shuffled toward his teammates and hoisted the golden trophy high in the air.
It was an iconic sight that finally — definitively — places the soccer superstar in the pantheon of the game’s greatest players.
Messi’s once-in-a-generation career is complete: He is a World Cup champion.
In probably the wildest final in the tournament’s 92-year history, Argentina won its third World Cup title by beating France 4-2 in a penalty shootout after a 3-3 draw featuring two goals from the 35-year-old Messi and a hat trick by his heir apparent, France forward Kylian Mbappé.
“It’s just crazy that it became a reality this way,» Messi said. “I craved for this so much. I knew God would bring this gift to me. I had the feeling that this (World Cup) was the one.”
Amid the chaos inside Lusail Stadium, Mbappé did all he could to emulate Brazil great Pelé as a champion at his first two World Cups. Even scoring the first hat trick in a final since Geoff Hurst for England in 1966.
It wasn’t enough.
Now there’s no debate. Messi joins Pelé — a record three-time World Cup champion — and Diego Maradona, the late Argentina great with whom Messi was so often compared, in an exclusive club of the best soccer players of all time.
Who is the greatest? It’s a discussion that will rage forever because there can never be a definitive answer. Messi has put up a good argument, though, and — with the World Cup title on his resume — he is surely above Cristiano Ronaldo as the best player of his generation.
Messi achieved what Maradona did in 1986 and dominated a World Cup for Argentina. He scored seven goals and embraced the responsibility of leading his team out of those dark moments after a shocking 2-1 loss to Saudi Arabia in the group stage.
Playing in the spirit of Maradona, Messi coupled his dazzling skills with rarely seen aggression and led Argentina to the title by becoming the first man in a single edition of the World Cup to score in the group stage and then in every round of the knockout stage.
The torch will one day pass to Mbappé, but not just yet.
“Let’s go, Argentina!” Messi roared into a microphone on the field in the post-match celebrations after playing in a record 26th World Cup match.
Later, he said: “I can’t wait to be in Argentina to witness the insanity of this.”
Messi had a tantalizing glimpse of the 18-carat gold World Cup trophy when walking on the stage to collect the Golden Ball, awarded to the player of the tournament. He even kissed the World Cup and rubbed it repeatedly.
He got his hands on it for good about 10 minutes later, after a ceremonial robe — a bisht — was draped over his shoulders by Qatar’s emir, Sheikh Tamim bin Hamad Al Thani. And, oh, did he enjoy the moment, celebrating with his family and the teammates who put Argentina atop the soccer world for the first time since the 1986 World Cup in Mexico. The country’s other title came in 1978 on home soil.
Messi was in scintillating form from the start of the final, putting Argentina ahead from the penalty spot after Angel Di Maria was tripped and later playing a part in a flowing team move that resulted in Di Maria making it 2-0 after 36 minutes.
Mbappé, on the other hand, was anonymous until bursting into life by scoring two goals in a 97-second span — one an 80th-minute penalty, the other a volley from just inside the area after a quick exchange of passes — to take the game to extra time at 2-2.
Messi still had plenty of energy and he was on hand to tap in his second goal in the 108th minute, with a France defender clearing the ball just after it had crossed the line. Argentina was on the brink of the title once again, but there was still time for another penalty from Mbappé, after a handball, to take the thrilling game to a shootout.
“We managed to come back from the dead,” said France coach Didier Deschamps, whose team was looking to become the first back-to-back champions since Brazil in 1962.
Mbappé and Messi took their teams’ first penalties and scored. Kingsley Coman had an attempt saved by Argentina goalkeeper Emi Martinez and Aurelien Tchouameni then missed for France, giving Gonzalo Montiel the opportunity to end it. He converted the penalty to the left and sparked wild celebrations.
“The match was completely insane,” said Argentina coach Lionel Scaloni, who was asked if he had a message for Maradona, who died two years ago.
“If he had been here, he would have enjoyed it so much,” Scaloni said. “He would have been the first person on the field (to celebrate). I wish he’d have been here to enjoy the moment.”
Europe’s run of four straight World Cup winners, dating to 2006, came to an end. The last South American champion was Brazil, and that was also in Asia — when Japan and South Korea hosted the tournament in 2002.
In Qatar, Argentina backed up its victory from last year’s Copa America, its first major trophy since 1993. It’s quite the climax to Messi’s international career, which is not over just yet. He said after the match that he would continue to play with the national team.
It was quite a final for a unique World Cup — the first to be played in the Arab world.
For FIFA and the Qatari organizers, a final between two major soccer nations and the world’s two best players represented a perfect way to cap a tournament laced in controversy ever since the scandal-shrouded vote in 2010 to give the event to a tiny Arab emirate.
The years-long scrutiny since has focused on the switch of dates from the traditional June-July period to November-December, strong criticism of how migrant workers have been treated, and then unease about taking soccer’s biggest event to a nation where homosexual acts are illegal.
On Sunday, there was one narrative at play for most people: Could Messi do it?
He could, despite the 23-year-old Mbappé doing all he could to deny his Paris Saint-Germain teammate. Finishing the tournament as the top scorer with eight goals is likely only a crumb of comfort.
Messi has been a man on a mission in the Middle East, determined to erase memories of his only other World Cup final — in 2014 when Argentina lost to Germany 1-0 and Messi squandered a great chance in the second half.
On that night at the Maracana Stadium, Messi stared down at that golden World Cup trophy that escaped him.
Eight years later, he raised it aloft in the biggest moment of a career like no other.
