Vista de una manifestación protestan por el racismo en Filadelfia, EEUU. EFE/Bastiaan Slabbers/Archivo

El arzobispo de Filadelfia, Nelson Pérez, de origen cubano, ha exhortado al público este viernes a participar el próximo lunes en un evento virtual ecuménico en el que pedirán por el fin del racismo en Estados Unidos. «Oraciones por nuestra ciudad: de nuestra tradición» es el día de oración organizado por el Consejo de Líderes Religiosos de Filadelfia.

El acto religioso se basará, según un comunicado, «en los ricos recursos de varias tradiciones religiosas para lamentar y confesar el pecado del racismo y comprometernos con la obra sagrada de desmantelarlo y construir una sociedad justa».

El pasado mayo, tras la muerte del afroamericano George Floyd a manos de un policía banco en Minnesota, Pérez, a quien el papa Francisco nombró arzobispo el pasado enero, tras lo cual asumió la dirección de la Arquidiócesis de Filadelfia (Pensylvania, señaló que esa tragedia recordó que el racismo no ha sido erradicado de este país.

«Más bien ha resurgido en comunidades de todo nuestro país durante los últimos años con viejas heridas abiertas dolorosamente una y otra vez» señaló, y afirmó además que el racismo «es un pecado mortal» y que es responsabilidad de todos erradicarlo.

La muerte de Floyd generó masivas y a veces violentas protestas a través del país exigiendo cambios en los departamentos de policía, y algunos estados como Nueva York aprobaron reformas con ese propósito.

Las protestas y arrestos retornaron la pasada semana a Louisville (Kentucky) al conocerse la decisión de la Fiscalía de no acusar de asesinato a los policías involucrados en la muerte de la afroamericana Breonna Taylor en su apartamento en marzo pasado.

La decisión de la Fiscalía justifica la actuación de dos de los tres policías en la entrada a tiros y supuestamente sin identificarse en el apartamento de Taylor, en un registro sobre tráfico de drogas relacionada con un exnovio de la mujer.

El Consejo, fundado en 2009 y que representa más de dos millones de personas en la región de Filadelfia, también había condenado su muerte, que catalogó de «cruel e inhumana».

De acuerdo con el comunicado, el Consejo fue creado con el fin de construir relaciones de apoyo mutuo, ofrecer una voz moral y espiritual en la región e identificar temas de interés local para el diálogo y la acción.

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