Hoy despertamos en la ciudad de Filadelfia, en el área tri-estatal y en República Dominicana, con la triste y dolorosa noticia del fallecimiento en circunstancias desconocidas de nuestro querido amigo, ser humano y periodista, Polón Vásquez, quien era oriundo de la República Dominicana.

Algunos amigos comenzaron a extrañar sus llamadas diarias y decidieron investigar. Vecinos percibieron un olor extraño que provenía de su departamento, y alertaron a las autoridades competentes. Al ingresar, descubrieron su cuerpo en un sillón y los expertos determinaron que su fallecimiento había ocurrido hace aproximadamente cinco días.

Esta información ha sido compartida por sus amigos y fue difundida en redes sociales y medios de comunicación.

Polón Vásquez sin lugar a dudas, fue un pionero del periodismo comunitario en el área metropolitana de Filadelfia, y sus reportes los llegó a realizar desde diversos países.  

Fue un innovador en el periodismo digital y, sobre todo, en ayudar a amplificar la voz de aquellas personas, incluyéndome a mí, que deseábamos avanzar en nuestras vidas y proyectos. Él nos brindaba la oportunidad y nos entrevistaba y publicaba todas esas historias en varios medios de comunicación para los cuales escribía.

Polón entrevistaba personas famosas y a aquellas que nunca habían sido publicanos en ningún medio de información.

Le apasionaba tomar fotografías y respaldar variedad de eventos latinos. Algo que siempre admiré fue su periodismo genuino, alejado del sensacionalismo y centrado en fortalecer a los seres humanos y a nuestra comunidad.

El periódico Impacto fue su hogar durante muchos años y siempre lo utilizó como una herramienta para bendecir.

Hoy nos ha dejado y muchos de nosotros lloramos su partida, pero también estamos agradecidos por haber compartido su vida y recibir su amor, apoyo, risas y beneficiarnos de su maravilloso talento que Dios le otorgó, como compartir historias con papel y pluma, que hoy son celestiales.

Los invitamos a elevar una oración en su nombre, para que descanse en paz. Querido amigo, muchas gracias, gracias, gracias por apoyarme, incluso sin ser de tu país, porque siempre brindabas apoyo a todos, sin distinciones. Eso es lo que te hace inolvidable y hoy nos dejas un legado de continuar comunicándonos sin agendas y con el único objetivo de beneficiar a todos; con amor y gratitud.

Continuaremos informando sobre este acontecimiento.

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