Las distintas iglesias en Estados Unidos muestran unos niveles muy altos de segregación racial «espontánea», pero dentro de los grupos étnicos, los que se identifican como latinos protestantes asisten a iglesias que presentan mucha mayor diversidad.
El medio Axios Latino publica hoy una encuesta realizada entre creyentes cristianos por el Instituto de Investigaciones de Religión Pública (PRRI, siglas en inglés) en la que se pedía a los encuestados decir si la iglesia a la que acuden «es principalmente de la misma raza o etnia que ellos».
Los encuestados debían identificarse como blancos, negros o hispanos, y a continuación como católicos o protestantes; en general las respuestas arrojan grupos muy homogéneos de «blancos protestantes», «blancos católicos» o «negros protestantes», con porcentajes de entre 74 y 80 % de afinidad étnica y religiosa.
La única excepción la constituyen los hispanos protestantes, que dicen que sólo el 47 % de sus correligionarios en el templo son hispanos como ellos, lo que significa que sus iglesias son las más diversas desde el punto de vista étnico.
Preguntados por qué otros grupos raciales frecuentan esas mismas iglesias protestantes, los hispanos identifican primero a los blancos (26 %) y luego a lo que llaman congregaciones multirraciales (20 %).
En un contexto de rápidos cambios demográficos y religiosos en Estados Unidos, Axios se atreve a adelantar algunas de las razones que podrían impulsar esta mayor diversidad en las iglesias protestantes a las que acuden los latinos.
Primero, puede deberse a que los hispanos acuden a las llamadas «megaiglesias» protestantes, que en todo el país son las más étnicamente diversas; segundo, está la explicación histórica: los hispanos no se identifican con la cultura de la segregación racial y del esclavismo que ha marcado en uno u otro sentido a los blancos y los negros de Estados Unidos, y por ello son más «abiertos» a la hora de elegir su templo.
El estudio incluye por último, sin aportar datos que lo demuestren, la tesis de que el grupo hispano que más está creciendo demográficamente es el «no creyente o no afiliado a ningún credo», y en paralelo, aunque parezca contradictorio, que también los protestantes suben y supondrán en 2030 la mitad de los creyentes hispanos. Combinadas ambas ideas, significaría que solo los católicos están en franco retroceso.
