Hizo de todo en los diferentes medios en los que participó durante más de cuatro décadas de trayectoria.
Reportero de campo (“se ensuciaba los zapatos” como se dice en el medio), corresponsal de guerra, productor, conductor, redactor, columnista, entrevistador (aunque a él le gustaba llamar “conversación”), coordinador, director, creativo, investigador, pionero de debates políticos, impulsor del periodismo ciudadano, conferencista, analista político… y un largo etcétera que termina en MAESTRO, formador de varias generaciones de profesionales de la comunicación, de reporteros, de todo aquel que trabajara cerca, algunos son personajes famosos de los medios, otros permanecen en el anonimato.
Fue maestro, pero no de aula, como otros grandes del gremio, Oriana Fallaci, Ryszard Kapuscinski, Gabriel García Márquez. Sí, era un periodista como pocos. A él se le podía –y puede-aprender siempre… escuchando y viendo sus programas, leyendo sus columnas y de unos años a la fecha, siguiéndolo en redes sociales y ahora, aunque nos abandonó en este mundo terrenal, quedan para el análisis, y por supuesto deleite, sus conversaciones en varios sitios en internet.
Ricardo Rocha Reynaga nació en la ciudad de México en 1947. Su infancia la vivió en Peluqueros 35, en lo que se conoce como el barrio bravo de Tepito. Durante su formación básica ganó varios concursos de oratoria y es que, para él, la voz, la entonación y el ritmo eran primordiales para informar.
En 1968, año emblemático en muchas partes del mundo, Ricardo vivió de cerca el movimiento estudiantil, mientras cursaba Administración de Empresas en la UNAM, institución de la que siempre estuvo orgulloso de formar parte. En varias entrevistas contaba que se inclinó por el periodismo, pero que el haber estudiado administración le ayudó mucho para repartir tareas a los integrantes de su equipo.
En 1977 cubrió la revolución Sandinista en Nicaragua y con su trabajo ganó el Premio Nacional de Periodismo.
A la par de sus proyectos, en 1997 ocupó la presidencia de la División Radio de Televisa, conocida como Radiopolis. Ese mismo año diseñó “Detrás de la Noticia” que se transmitió en un inicio en radio y televisión y años más tarde (1999) se consolidó como agencia de noticias, un proyecto que en su lanzamiento contó con la alianza estratégica con la BBC de Londres y Grupo ACIR.
Ricardo no solo hablaba de política, era un hombre culto. En proyectos como en “Para gente grande”, que duró 14 años al aire, entrevistó a destacados personajes de distintos ámbitos como Rocío Durcal, Carlos Fuentes, Juan José Arreola, Jaime Sabines, Facundo Cabral, Alberto Cortez, Joaquín Sabina, Rigoberta Menchú, Elton John, Cantinflas, Mauricio Garcés y otro largo etcétera. Incluso ahora se pueden leer esas conversaciones en un libro que se vende online con el título “Conversaciones para gente grande”.
En el mundo de los libros también participó como coautor en “Yo Corresponsal de Guerra, vivencias íntimas de los reporteros en el frente”, publicado en 1986.
Fue amigo de grandes personalidades como María Félix, José José, Julio César Chávez y Héctor Bonilla, entre otros.
¿Pero qué hizo diferente Ricardo Rocha en los medios?
-Exhibir las corruptelas de los gobiernos sin importar el partido político al que pertenecieran.
-Tenía una agenda marcadamente social.
Con varios de sus reportajes hizo historia. Se trataba de denunciar injusticias como la masacre de 17 campesinos, y 23 heridos, por parte de policías en Aguas Blancas, Guerrero, durante la administración del gobernador Rubén Figueroa Alcocer.
Ocurrió en 1995, un año después, Rocha tomó la decisión de transmitirlo en televisión nacional. Fue un escándalo.
-Tenía una relación cercana con Chiapas. Así que cuatro días después del levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional en 1994, él ya se encontraba allá, mandando sus primeros reportes, a los que les siguieron entrevistas y mesas de debate con especialistas. En diciembre de 1997 difundió “Chiapas, crónica de una infamia”, en la que mostraba la difícil situación en la que vivían los desplazados y advertía de los grupos paramilitares. Luego ocurrió la matanza en Acteal de 45 personas, entre ellos niños y mujeres embarazas, el 22 de diciembre. Situación que también documentó.
En 1998, desde algún lugar de las montañas del sureste mexicano, Rocha entrevistó por primera vez al subcomandante Marcos.
-No se encasilló como un lector de noticias, era un reportero “todo terreno” que lo mismo hablaba de política que de temas culturales.
-Encabezó espacios nocturnos de entretenimiento con alto contenido cultural como “Para gente grande” y “En vivo” en Televisa y Animal Nocturno en TV Azteca. Los tres se convirtieron en un referente nacional.
-En sus programas nocturnos fue el primero que tuvo colaboradores para hablar de sexo.
-Le gustaba siempre hablar con claridad, había que decir las cosas como son.
–Fue el primer periodista de la televisión mexicana que abrió espacios a la oposición.
-En múltiples ocasiones mostró a propios y extraños los costos que tiene la libertad periodística.
-Creó su propio medio de información al fundar su agencia (DDN).
-Le interesaba comunicar, que el público sintiera que importaba, y les pedía a sus reporteros y colaboradores saludar en general no a él, porque decía “Tenemos que tener respeto por quien nos ve o nos escucha”. Incluso en sus resúmenes decía la frase “Estamos todos juntos, Detrás de la Noticia”.
En 2015, Rocha tomó protesta como director general del Canal de Televisión de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
Durante más de dos décadas publicó su columna “Detrás de la Noticia” para el periódico “El Universal”, después las leía en Radio Fórmula, un verdadero deleite escucharlo.
Una pincelada más del periodista
En 1996, Ricardo Rochapor primera vez entrevistó a Andrés Manuel López Obrador (entonces líder del PRD) en Tabasco durante una protesta a instalaciones de Pemex en demanda de indemnizaciones a comunidades cercanas. Pero las cosas cambian con el tiempo y el 28 de mayo de 2019 acudió a la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador para reclamarle que su nombre apareciera en una lista de periodistas que recibieron “pagos millonarios” del gobierno de Peña Nieto. Lo dijo así: “Qué curioso, fíjese usted que los gobiernos anteriores, el panista y el gobierno priista, no me acabaron nunca de aceptar porque me etiquetaban de ‘lopezobradorista’, qué curioso que ahora el lopezobradorismo me quiera etiquetar de peñista ¿no?, mala puntería”.
A Ricardo Rocha Reynaga le sobreviven sus hijos Juan Francisco, Jorge, Ricardo y Alejandra.
Que en paz descanse este gigante del periodismo mexicano, Ricardo Rocha, siempre “Detrás de la Noticia”.
Que no se quede en el tintero:
Ricardo Rocha murió el domingo 4 de junio, en medio de las elecciones del Estado de México y Coahuila. Ese día iba a trabajar. El viernes 2 encabezó el que sería su último programa de radio, le habían pedido que se quedará en casa porque tenía problemas de salud, pero disciplinado como era transmitió desde las 5:30 de la mañana su noticiero en Radio Fórmula, ya casi al final de la transmisión pidió a su público seguirse cuidando el fin de semana por la pandemia de COVID 19, salir con precaución y usar cubrebocas, dijo que se encontrarían el lunes 5 y se despidió con su usual frase “Hasta entonces, hasta siempre”, de ahí el título de este escrito.
Nota de la editora: En los pasados días en las redes sociales han circulado varias fotografias que recuerdan la trayectoria de Ricardo Rocha; también aparece acompañado de personajes de todo el espectro de la vida pública; colaboradores, colegas, artistas, escritores, políticos… Estas son algunas de ellas.
