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Pennsylvania county says election workers flagged 2,500 possibly fraudulent voter registrations

Pennsylvania
Workers prepare mail-in ballots for counting, Nov. 4, 2020, at the convention center in Lancaster, Pa. (Photo: AP/Julio Cortez/File)

HARRISBURG, Pa. — Officials in a Pennsylvania county said Friday an investigation has been launched because election workers identified about 2,500 voter registration forms that may be fraudulent.

“Board of Elections staff members identified and contained incidents of voter registration fraud,” the Lancaster County Elections Board said in a news release early Friday. “Elections staff and the district attorney’s office are currently assessing the nature and the volume of fraud.”

Pennsylvania is a pivotal swing state in the Nov. 5 election, where polls indicate the presidential contest is a close race and where 19 electoral votes are at stake.

Lancaster County’s district attorney, Republican Heather Adams, and the three county commissioners planned a news conference to describe how the registration forms were identified and isolated, as well as the investigation.

The elections board consists of the three commissioners — Republicans Ray D’Agostino and Josh Parsons and Democrat Alice Yoder.

The county’s news release said the registrations in question arrived in two batches shortly before Pennsylvania’s deadline to register to vote, which was this past Monday.

Más clínicas móviles están llevando anticonceptivos de acción prolongada a zonas rurales

rurales
Nurse practitioner Angela Tanguma (left) and medical assistant Adriana Rojas (right) treat Ana Osario in the UniMóvil, a mobile clinic that serves Texas' rural Rio Grande Valley. (Carlos Cuadros /University of Texas Rio Grande Valley School of Medicine)

Dos veces al mes, un bus de 40 pies de largo transformado en clínica móvil recorre el Valle del Río Grande para ofrecer a las mujeres de las zonas rurales de Texas servicios de salud que incluyen métodos anticonceptivos.

La clínica, llamada UniMóvil, forma parte del programa Healthy Mujeres de la Facultad de Medicina de la Universidad de Texas Rio Grande Valley.

En Estados Unidos hay unos 3,000 programas de salud móviles. Pero el gineco-obstetra Saúl Rivas dijo que no conocía ninguno que compartiera la misión específica de Healthy Mujeres cuando ayudó a lanzar la iniciativa en 2017.

Ahora forma parte de un pequeño pero creciente número de programas móviles destinados a aumentar el acceso de las comunidades rurales a los cuidados de salud de la mujer, incluida la anticoncepción reversible de acción prolongada.

Hay dos tipos de métodos altamente eficaces: los dispositivos intrauterinos, conocidos como DIU, y los implantes hormonales que se insertan en la parte superior del brazo. Estas opciones anticonceptivas pueden ser especialmente difíciles de obtener —o de poder retirarlas— en las zonas rurales.

“Las mujeres que quieran evitar un embarazo no deseado deben disponer de lo que más les convenga”, señaló Kelly Conroy, directora de programas móviles y de salud materna de la University of Arkansas for Medical Sciences.

La universidad va a poner en marcha este mes un programa móvil de salud femenina y anticoncepción en las zonas rurales del estado.

En las áreas rurales hay muchos menos médicos que en las zonas urbanas, incluidos los gineco-obstetras. Además, según los responsables del programa, es posible que los proveedores rurales no puedan permitirse el gasto de tener dispositivos anticonceptivos de acción prolongada, o no estén formados para administrarlos.

Las clínicas móviles ayudan a reducir esa brecha de salud en las zonas rurales, pero su funcionamiento puede resultar complicado, afirmó Elizabeth Jones, directora de la Asociación Nacional de Planificación Familiar y Salud Reproductiva.

El dinero es el mayor obstáculo, dijo Jones. El programa de Texas cuesta unos $400,000 al año. Un estudio realizado en 2020 sobre 173 clínicas móviles reveló que costaban un promedio de más de $630,000 al año. Los programas dentales móviles eran los más caros, superando el millón de dólares.

Aunque muchos programas se ponen en marcha con la ayuda de subvenciones, éstas pueden ser difíciles de mantener, sobre todo porque desde hace más de una década se ha producido una  disminución o estancamiento de la financiación del Título X, una fuente de dinero federal que ayuda a las personas con bajos ingresos a recibir servicios de planificación familiar.

Por ejemplo, un programa móvil de anticoncepción que prestaba servicios en las zonas rurales de Pennsylvania duró menos de tres años y terminó en 2023. Dejó de funcionar cuando perdió la financiación federal, dijo un vocero de la clínica que lo gestionaba.

Los programas móviles rurales no son tan eficaces ni rentables como las clínicas físicas. Eso se debe a que el personal tiene que viajar horas para llegar a pueblos donde probablemente verán menos pacientes de los que verían en un sitio tradicional, explicó Jones.

Según ella, las organizaciones que no pueden permitirse programas móviles pueden considerar la creación de “clínicas emergentes” en centros comunitarios y de salud que ya funcionan en las zonas rurales.

María Briones es una paciente que se ha beneficiado del programa Healthy Mujeres en el sur de Texas. Esta trabajadora de guardería, de 41 años, estaba preocupada porque no tenía su menstruación con el DIU.

Se planteó ir a México para que le retiraran el dispositivo porque pocos médicos aceptan su seguro en el lado estadounidense del Valle del Río Grande.

Pero Briones se enteró de que la UniMóvil estaba en un pueblo de Texas a unos 20 minutos de su casa. Le dijo al personal que no quería tener más hijos, pero que estaba preocupada por el DIU.

Briones decidió quedarse con el dispositivo cuando le informaron que es seguro y que es normal no tener la menstruación mientras se usa un DIU. Aunque el sistema de salud de la universidad no acepta su seguro, no le cobrarán la cita que tuvo en la clínica móvil.

“Tienen mucha paciencia y respondieron a todas mis preguntas”, contó Briones.

Los DIU y los implantes hormonales son muy eficaces y pueden durar hasta 10 años. Pero también son caros —los dispositivos pueden costar más de $1,000 sin seguro— y la inserción de un DIU puede ser dolorosa.

A los activistas por los derechos de los pacientes también les preocupa que algunos proveedores presionen a las personas para que utilicen estos dispositivos.

Afirman que los programas éticos de control de la natalidad buscan capacitar a las pacientes para que elijan el método anticonceptivo —si lo hay— que más les conviene, en lugar de promover métodos de acción prolongada en un intento de reducir las tasas de natalidad y pobreza. Señalan la historia de la esterilización inspirada en la eugenesia e incluso incidentes más recientes.

Por ejemplo, una investigación de la revista Time descubrió que es más probable que los médicos presionen a las mujeres afroamericanas, latinas, jóvenes y de bajos ingresos que a otras pacientes para que utilicen métodos anticonceptivos de acción prolongada, y que se nieguen a retirar los dispositivos.

Rivas aseguró que el personal de Healthy Mujeres está formado en este tema.

“Nuestro objetivo no es necesariamente colocar un DIU o unos implantes”, dijo. Buscamos “proporcionar educación y ayudar a las pacientes a tomar las mejores decisions por ellas mismas”.

David Wise, vocero de la University of Arkansas for Medical Sciences, aseguró que el personal del programa móvil de la universidad preguntará a las pacientes si quieren quedarse embarazadas en el próximo año, y apoyarán su decisión. Los programas de Arkansas y Texas también retiran los DIU y los implantes hormonales del brazo si las pacientes no están satisfechas con ellos.

La iniciativa de Arkansas visitará 14 condados rurales con cuatro vehículos del tamaño de los camiones de comida que se utilizaron en anteriores iniciativas de salud móvil. El costo del personal y los equipos se sufragarán con una subvención de $431,000 de un donante anónimo durante dos años, explicó Wise.

Además de la anticoncepción, el personal docente y los médicos residentes que trabajen en los vehículos ofrecerán revisiones de salud femenina, vacunas, atención prenatal y pruebas, y tratamiento de infecciones de transmisión sexual.

Rivas explicó que el programa de Texas se inspiró en un estudio según el cual, seis meses después de dar a luz, el 34% de las madres de Texas encuestadas afirmaban que la anticoncepción de acción prolongada era su método anticonceptivo preferido, pero sólo el 13% lo utilizaba.

“Fue cuando empezamos a pensar en como abordar esa carencia”, dijo Rivas.

Healthy Mujeres, que se financia a través de múltiples subvenciones, empezó centrándose en la anticoncepción. Más tarde se amplió a servicios como ultrasonidos durante el embarazo, pruebas de detección del cáncer de cuello uterino, y pruebas para detectar infecciones de transmisión sexual.

Aunque los programas de Texas y Arkansas pueden facturar a los seguros, también cuentan con financiación para ayudar a las pacientes sin seguro, o con seguro insuficiente, a costearse sus servicios. Ambos recurren a trabajadoras de salud comunitarias —llamadas “promotoras” en comunidades mayoritariamente hispanohablantes como el Valle del Río Grande— para poner en contacto a las pacientes con alimentos, transporte, servicios médicos adicionales y otras necesidades.

Se asocian con organizaciones en las que confía la población local, como bancos de alimentos y colegios comunitarios, que permiten que las unidades móviles se instalen en sus estacionamientos. Y para aumentar aún más la disponibilidad de anticonceptivos de acción prolongada en las zonas rurales, las universidades forman a sus estudiantes y a los proveedores locales sobre cómo insertar, retirar, y obtener el reembolso de los dispositivos.

Una de las diferencias entre los programas viene dictada por las leyes estatales. El programa de Arkansas puede proporcionar anticonceptivos a menores sin el consentimiento de sus padres o tutores. Pero en Texas, la mayoría de los menores necesitan el consentimiento antes de recibir atención de salud, incluidos los anticonceptivos.

Los activistas afirman que estas iniciativas podrían ayudar a reducir las tasas de embarazos no deseados y de adolescentes en ambos estados, que son superiores al promedio nacional.

Rivas y Conroy afirmaron que sus programas no han recibido mucha oposición. Pero Rivas dijo que algunas iglesias que habían pedido que la UniMóvil visitara sus congregaciones cambiaron de opinión tras enterarse de que los servicios incluían métodos anticonceptivos.

Catherine Phillips, directora de la Respect Life Office de la diócesis católica de Arkansas, explicó que la diócesis apoya los esfuerzos para lograr la equidad en la atención de salud y que a ella personalmente le interesan los programas móviles que visitan zonas rurales como el lugar donde ella misma vive.

Pero Phillips agregó que el enfoque del programa de Arkansas en el control de la natalidad, especialmente los métodos de acción prolongada, va en contra de las enseñanzas de la Iglesia Católica. Ofrecer estos servicios a menores sin el consentimiento de los padres “lo hace más indignante”, dijo.

Jones señaló que, aunque estos programas tienen costos elevados y otros retos, también tienen beneficios que no pueden medirse en cifras.

“Generar confianza en la comunidad y tener un impacto en las comunidades más afectadas por las desigualdades en el acceso a la salud es algo de un valor incalculable”, afirmó.

KFF Health News es una redacción nacional que produce periodismo en profundidad sobre temas de salud y es uno de los principales programas operativos de KFF, la fuente independiente de investigación de políticas de salud, encuestas y noticias.

La comunidad del clima

Este mes tuve el privilegio de conocer a líderes como Leydy Pech del Colectivo de Comunidades Mayas de Hopelchén. Su lucha por la protección de las abejas, como una parte intrínseca de su cultura, me conmovió muchísimo.

Cuando compartió su historia, una de las primeras cosas que reconoció, es que ella nunca se imaginó que algún día se convertiría en una líder medioambiental merecedora del Premio Goldman. Fueron las circunstancias, la impunidad corporativa presente en México, la corrupción y sobre todo, las necesidades de su comunidad, las que la llevaron a alzar su voz y al hacerlo inspiró a miles de personas. 

Leydy Pech habló de cómo su activismo la empujó a salir de su zona de confort, de cómo muchas veces se sintió sola y aislada o se preguntaba por qué no más personas se daban cuenta de lo que estaba ocurriendo. Pero al ver las listas publicadas este mes como los 100 Latinos más comprometidos con la acción climática y los 20 Latinos en la lucha contra el cambio climático, es claro que somos muchos los que estamos empujando en la misma dirección. Muchos de diferentes rincones del mundo y de este país. Muchos de diferentes profesiones, culturas, ámbitos de la vida pública y sociedad civil. 

Entendemos que el cambio climático es mortal y costoso. Hace apenas unas semanas vimos la horrible ira del clima extremo a través de los huracanes Milton y Helene. Según el gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, el huracán Helene causó daños y pérdidas sin precedentes por valor de al menos 53.000 millones de dólares, y las autoridades estatales han informado de al menos 96 muertes a causa de Helene. 

Mientras nos acercamos a una elección presidencial decisiva, es más importante que nunca que los latinos entiendan cómo les afecta el cambio climático y que sepan cómo usar sus voces y su voto para asegurarse de elegir a líderes que tomen medidas urgentes.

Según el Informe de la ONU sobre la Brecha de Emisiones de 2024, el objetivo de mantener las temperaturas por debajo de 1,5 grados centígrados desaparecerá en pocos años a menos que las naciones se comprometan colectivamente a reducir el 42% de las emisiones anuales de gases de efecto invernadero para 2030 y el 57% para 2035. Es fundamental que Estados Unidos ponga de su parte y para ello es clave un buen liderazgo. 

Hace poco me preguntaron cómo me imaginaba un mundo en balance y mi respuesta habló de la capacidad de todos de comprender cómo estamos intrínsecamente conectados con nuestro medio ambiente. En él ya no existen estas listas, no son necesarias. Pero hasta que ese momento llegue, sumemos más y más personas a este movimiento. Sigamos aterrizando como cada espacio de nuestra vida está comprometido en esta lucha. 

Ya no hay tiempo y espacio para la desinformación climática. Ya no hay tiempo y espacio para el negacionismo. Ya no hay tiempo y espacio para líderes como Donald Trump dispuestos a seguir sacrificando nuestra salud en pos de las ganancias de los grandes contaminadores. 

Los próximos cuatro años determinarán si nos quedamos atrás y no logramos abordar la crisis climática, o si defendemos la transición necesaria a una economía verde, donde el aire y agua limpios para nuestras familias sea una prioridad.

En estas elecciones, alcen la voz y voten teniendo en cuenta el clima. Nuestro futuro depende de ello.

Antonieta Cádiz es la directora ejecutiva adjunta de Climate Power En Acción. Anteriormente, trabajó como corresponsal nacional para La Opinión y fue escritora política nacional para Univisión.

Apoyo a Trump crece entre hombres latinos, Harris sube entre mujeres blancas: sondeos Reuters/Ipsos

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Miembros de los medios de comunicación usan una pantalla para ver el debate presidencial entre el expresidente republicano Donald Trump y la vicepresidenta demócrata Kamala Harris en Filadelfia, Pensilvania, EE. UU., el 10 de septiembre de 2024. (Foto: VOA)

El apoyo a la candidatura presidencial del expresidente republicano Donald Trump creció entre los hombres latinos, mientras que la vicepresidenta demócrata Kamala Harris ha ganado seguidoras entre las mujeres blancas, en una carrera reñida por la Casa Blanca.

El republicano Donald Trump ha prácticamente borrado la ventaja que los demócratas tenían desde hacía tiempo entre los hombres hispanos de cara a las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, cuando se enfrentará a la demócrata Kamala Harris, según un análisis de las encuestas de Reuters/Ipsos.

El expresidente Trump ahora está detrás de la vicepresidenta Harris por solo 2 puntos porcentuales entre los hombres hispanos (44 % frente a 46 %) en comparación con su déficit de 19 puntos con el demócrata Joe Biden en el mismo momento de 2020, según el análisis de más de 15.000 respuestas a los sondeos de Reuters/Ipsos realizados hasta el 21 de octubre, el mismo período que hace cuatro años atrás.

Las ganancias de Trump se han visto contrarrestadas por un mayor apoyo a Harris entre las mujeres blancas, que lo favorecían a él sobre Biden por 12 puntos a finales de 2020, pero ahora se inclinan por los republicanos por 3 puntos ( 46% frente a 43%).

Los dos candidatos están enfrascados en una carrera excepcionalmente reñida, con Harris subiendo apenas marginalmente – 46 % frente a 43 %- en la última encuesta de Reuters/Ipsos realizada entre el 16 y el 21 de octubre.

Estas variaciones son parte de cambios más amplios en las coaliciones con las que cada candidato cuenta para la victoria, con Trump aumentando su ventaja entre los votantes hispanos y negros -en particular los hombres- mientras que Harris ha recortado el margen positivo de larga data de los republicanos entre los votantes blancos, al ganar terreno entre las mujeres.

Robert Alomia, un votante hispano de Elizabeth, Nueva Jersey, que trabaja en una empresa de seguridad, dijo que respeta la carrera de Trump como empresario y planea votar por él este año después de no participar en las elecciones de 2020.

«Necesitamos gente que piense rápido y gente que esté dispuesta a liderar; él es un líder», dijo Alomia, de 42 años, quien dijo que también simpatizaba con las opiniones de línea dura de Trump sobre la inmigración. «Hay gente que viene al país, donde consigue todo, y básicamente la puerta está abierta para ellos».

Trump ha acusado a la administración Biden de dejar la frontera sur abierta a los migrantes, mientras que Harris ha respondido a esa denuncia culpando a Trump de presionar a los republicanos en el Congreso para que descarten un proyecto de ley bipartidista de seguridad fronteriza que habría endurecido los controles fronterizos.

Los votantes hispanos, el segmento de más rápido crecimiento del electorado estadounidense, se han inclinado fuertemente por los demócratas en la mayoría de las elecciones presidenciales desde la década de 1970, pero Trump ha logrado avances significativos.

El análisis de las encuestas recientes de Reuters/Ipsos muestra que Trump cuenta con el apoyo del 37 % de los votantes hispanos registrados, frente al 30 % en el mismo momento de 2020. Harris tiene el 51 % en comparación con el 54 % de Biden cuatro años antes. Las cifras están sujetas a errores de muestreo y tienen niveles de precisión de entre 2 y 6 puntos porcentuales.

Trump terminó ganando el 38 % de los votos hispanos en 2020, 21 puntos por debajo de Biden, pero aún así la mayor participación para un candidato republicano desde que el presidente George W. Bush ganó el 44 % en 2004, según un análisis de encuestas de salida de 2020 del Pew Research Center y cifras históricas compiladas por el American Enterprise Institute.

Cambio entre los hombres negros

El republicano también va camino de reducir la fuerza de los demócratas en el electorado negro. Alrededor del 18 % de los hombres negros lo eligieron en las encuestas recientes de Reuters/Ipsos (frente al 14 % de cuatro años antes), al igual que el 8 % de las mujeres negras, frente al 4 %. Las encuestas a la salida de las elecciones de 2020 mostraron que alrededor del 8 % de los votantes negros en general eligieron a Trump en 2020, mientras que la encuesta reciente de Reuters/Ipsos lo muestra con un 12 %.

La estratega de campaña republicana Kristin Davison dijo que Trump está cortejando a los votantes negros al convencerlos de que el Partido Demócrata es demasiado extremista en cuestiones sociales.

«Eso es lo que Trump ha podido hacer con los hombres negros y con los hispanos en los últimos cuatro años, no solo en las cuestiones de la economía y el trabajo duro, sino también con el país y la familia», dijo.

La historia de tensión racial e injusticia de Estados Unidos está muy presente en la mente de los partidarios y detractores de Trump. Trump preguntó a los votantes negros durante su campaña presidencial de 2016: «¿Qué demonios tienen que perder?».

«Mucha gente podría jugar la carta racial. Podrían decir que es racista, podrían decir que está utilizando a los negros. Podrían decir muchas cosas. Pero para mí, personalmente, siento que demostró que quiere ver a todos ganar», dijo Kedrick Benford, un votante negro de Houston que no votó en 2020 pero dijo que cree que votará por Trump esta vez.

Benford, de 30 años, un comerciante autónomo, dijo que consideraba que Trump tenía más experiencia que Harris.

Harris ha mantenido la carrera reñida en parte al ganar a las mujeres blancas, que representaron aproximadamente cuatro de cada diez votantes en 2020, el doble de la proporción combinada de votantes negros e hispanos.

Aunque el porcentaje de apoyo de los hombres blancos a los dos candidatos se mantiene prácticamente sin cambios, el impulso de Harris entre las mujeres blancas significa que Trump solo lleva una ventaja de nueve puntos entre los votantes blancos en general, en comparación con cuando aventajaba a Biden por 14 puntos entre ellos en 2020.

La estratega republicana Davison dijo que muchas mujeres han recurrido a Harris en parte porque los demócratas las han enfocado efectivamente en el aborto después del fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos de 2022 que puso fin a las garantías federales de su práctica legal.

Las mujeres también están evaluando «el marcado contraste en liderazgo y carácter entre la vicepresidenta y Trump, que está influyendo en sus decisiones», dijo Meghan Hays, estratega demócrata y exasistente de comunicaciones del presidente Biden.

«La vicepresidenta debe ampliar su ventaja entre las mujeres votantes para compensar la ventaja de Trump entre los hombres negros y latinos», agregó Hays. «Esta elección se ganará por el menor margen».

Donna Berg, una mujer blanca de St. Charles, Illinois, votó por Trump en 2016 y de nuevo «a regañadientes» en 2020, pero Berg descartó a Trump de manera decisiva tras el ataque al Capitolio de Estados Unidos del 6 de enero de 2021.

«Después del 6 de enero, todo se acabó», dijo Berg. Dijo que el Partido Republicano ha virado hacia el extremismo bajo el liderazgo de Trump y que votaría por Harris este año. «No necesariamente votaré por ella, sino que votaré en contra de Trump».

Cerca de 33 millones de estadounidenses ya han votado de manera anticipada

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Fotografía de un cartel en inglés y español que indica un puesto de votación cerca de un centro de votación en Woodbridge, Virginia (EE. UU). Imagen de archivo. (Foto: EFE/Jorge Bañales)

Cerca de 33 millones de estadounidenses ya han votado de manera anticipada antes de la fecha oficial del 5 de noviembre, tanto por correo (17,8 millones) como en persona (15 millones) en aquellos estados donde ya se ha abierto esa posibilidad.

Según los datos recogidos por el Laboratorio Electoral de la Universidad de Florida, los estados donde se han registrado más votos son Texas (3,3 millones), Florida (3,3) y California (3,2), mientras que Georgia y Carolina del Norte también superan los 2 millones.

Los estados han abierto los votos anticipados en fechas distintas -algunos tan importantes como Nueva York aún no lo han hecho-, lo que explica la disparidad de cifras, pues en algunos de ellos han votado menos de 100.000 personas. En todo caso, el número de votos anticipados supera al de cualquier otra elección anterior, según los estudios comparados.

Según los datos del laboratorio, hasta ahora son mayoritarios los votantes registrados demócratas (41 %) frente a los republicanos (35 %), pero el dato no es decisivo dado que hay un 23 % de votantes que no se registraron con etiqueta partidista.

Por franja de edad, los que más han votado anticipadamente son los mayores de 65 (45 % del total), y los porcentajes van descendiendo hasta llegar a los más jóvenes, de 18 a 25 (5,8 % de los votos); también se aprecia una gran diferencia por género, siendo mayor el voto de mujeres que el de hombres (54 % frente a 43 %).

Por división racial, un 66 % de votantes responden a la categoría de «blancos no hispanos», seguidos de «negros no hispanos» (22 %), mientras que los hispanos solo representan el 2 % del voto anticipado a nivel nacional.

Datos recopilados por CNN en base a varias fuentes muestran que en cuatro de los siete estados decisivos en estados estas elecciones los republicanos se están movilizando con más fuerza que en 2024 de manera anticipada, algo que en esta campaña el candidato conservador, el expresidente Donald Trump, ha pedido reiteradamente a sus simpatizantes.

En Arizona, Carolina del Norte y Nevada la movilización del votantes registrado como republicano ha sido entre cinco y nueve puntos mayor que en 2020, mientras que en Pensilvania el voto anticipado republicano ha aumentado en diez puntos, pero es inferior al 60 % de votantes inscritos como demócratas.

Los 32,9 millones de votos anticipados suponen un porcentaje alto cuando aún faltan 12 días antes de las elecciones, teniendo en cuenta que de los 244 millones de estadounidenses mayores de edad solo votan los que han dado el paso de registrarse; en 2020 hubo algo más de 168 millones de votantes, según la Oficina del Censo, y este año las cifras apuntan a un número mayor de inscritos, en torno a 180 millones.

Two historic Philadelphia churches offer lessons for an America divided today and in its infancy

Philadelphia
The Christ Church steeple is reflected on “Liberty Window,” a stained-glass window depicting the First Prayer of Congress on display located at the church Neighborhood House in Philadelphia on Sunday, Oct. 6, 2024. (Photo: AP/Luis Andres Henao)

PHILADELPHIA.— George Washington. Benjamin Franklin. Betsy Ross. The two Founding Fathers and the seamstress of the American flag all once worshipped on the now centuries-old wooden pews of Christ Church.

It’s the site of colonial America’s break with the Church of England — and where the U.S. Episcopal Church was born.

Less than a mile south, past Independence Hall, Mother Bethel African Methodist Episcopal Church stands on the oldest parcel of land continuously owned by Black Americans. It’s the mother church of the nation’s first Black denomination.

Two churches, across the centuries. Generations after their birth in this nation first envisioned in Philadelphia, both churches continue to serve as the spiritual home for hundreds in the city.

Church members see the role of their congregation as crucial, a beacon ahead of a contentious presidential election in Pennsylvania — the most pivotal of swing states. They also express concerns about political division that the Founding Fathers once feared could tear the nation apart.

“We’ve grown as a nation, but I think at this point, we’re at a standstill. We’re terribly divided,” said Christ Church parishioner Jeanette Morris. A registered Republican, she previously voted for former President Donald Trump, but plans to back Vice President Kamala Harris on Nov. 5 because of her support for reproductive rights. Morris is concerned about health issues following the repeal of Roe v. Wade.

“Nothing is getting done in Washington because nobody can agree on anything,” she said after a recent service. “I pray every Sunday that we can get past this all.”

Today’s list of divisive issues is long: from abortion and immigration to taxes, climate change and the wars abroad. It’s also the first presidential election since an insurrection at the U.S. Capitol, an act of political violence steeped in the lie that the 2020 election was stolen.

“I think things have changed: Slavery is abolished. The Civil Rights Act was put in place. But still, deep down, the denizens of the United States haven’t really come together,” says Keith Matthews, 61, a Mother Bethel AME parishioner. “There’s still a lot of hatred and misunderstanding amongst the races.»

Choir members sing hymns at Christ Church in Philadelphia at a service on Sunday, Oct. 6, 2024. (Photo: AP/Luis Andres Henao)

The nation’s church was at the center of it all

At its infancy, the United States of America also was deeply divided. And some members of Christ Church — from Washington to the parish rector — seemed to be at the center of it all.

“What we’re going through right now is certainly unprecedented politically. And there’s a huge amount of potential instability and concern that a lot of people have in this church and the United States,” says Zack Biro, executive director of the Christ Church Preservation Trust. “And Christ Church is a perfect example of kind of weathering that storm.”

The church was founded in 1695 by a group of Philadelphia colonists as the first parish of the Church of England in Pennsylvania. Congregants later included slaves and their owners, loyalists and patriots. They listened to sermons favoring and opposing independence.

Anglican clergy loyal to the British king led weekly prayers for the monarch. But on July 4, 1776, Christ Church’s vestry crossed out the king’s name from the Book of Common Prayer — a defiant act of potential treason. The book is preserved today in an underground museum, a testament to the church’s revolutionary spirit on Independence Day.

“We tend to think that the early American republic was a time of great unity, but, like today, the political culture was deeply polarized,” says John Fea, a professor of American history at Messiah University in Pennsylvania.

During the 1780s, Fea said via email, debate raged about how to apply revolutionary-era principles such as liberty or freedom to all Americans. From the pulpit, the Rev. Jacob Duché, the church’s rector, was seen as a moderate and led prayers as the first chaplain of the Continental Congress. But then he sided with the loyalists.

When the British occupied Philadelphia in 1777, the rector wrote a letter to Washington urging him to surrender and reach a deal with the British. After the letter became public, Duché traveled to England. Pennsylvania officials later labeled him a traitor and banned his reentry. His successor, the Rev. William White, became the first presiding bishop of the Episcopal Church. He’s praised for keeping the unity of his congregation during times of turmoil.

Christ Church’s current senior pastor is the Rev. Samantha Vincent-Alexander, the first woman to serve as rector in its more than 300-year history.

“The idea of what do we do in this political environment right now and how do we deal with that is an incredible challenge,» she says. “Most of our congregations are not a unified voting bloc. They represent different people much like at the time of the American revolution.»

“We had people who were loyalists and people who supported independence, and the clergy at the time had to find a way to keep the congregation together.”

Congregants remain proud of Christ Church’s crucial role in America’s freedom. But they also grapple with contradictions. Some church members traded slaves and are buried in the church yard near signers of the Declaration of Independence. Franklin’s tomb is in the nearby Christ Church burial ground.

“While we’re very proud of our history, these people were not perfect. Sometimes we tend to think of them that way, but they weren’t,” says Harvey Bartle, a congregant for more than 30 years. “What they were doing is trying to promote democracy. … At least they advanced the ball beyond the divine right of kings, so that the society, rich and poor, educated and uneducated, could advance the system.”

One church member, Absalom Jones, attended services at a sister congregation while enslaved to a man serving in the church leadership. Jones bought his freedom and eventually became ordained by the Christ Church rector as the first Black priest of the Episcopal Church. He also went on to co-create the Free African Society of Philadelphia, which Fea says “sought to apply the rights secured from the American Revolution to the 2,000 or so free Black men and women living in the city at the time.”

Methodism was the fastest growing denomination in America in the 1790s. But some Methodist Episcopal Churches still segregated Black worshippers during services to the upstairs galleries. This prompted free Black Americans to start their own congregation.

A statue of Mother Bethel AME Church founder stands on the oldest parcel of land continuously owned by Black Americans in Philadelphia on Oct 13, 2024. (Photo: AP/Luis Andres Henao)

Mother Bethel AME fought for freedom from the start

The African Methodist Episcopal Church has been involved in the struggle for freedom and equality from its roots.

Its founder, the Rev. Richard Allen, was born into slavery in Philadelphia in 1760 before buying his freedom in Delaware before he was 20. He returned to the city in the 1780s and became a minister.

After white leaders at a Methodist church segregated Allen, Jones and other Black worshippers to the upstairs galleries for a prayer service, the group left the church and formed what would eventually become Mother Bethel AME. The church became a place of refuge for Black people fleeing slavery along the Underground Railroad and later a major gathering point for the Civil Rights Movement.

By creating Mother Bethel, Allen «carved out a space where Black people could resist … at a time where during slavery in the Deep South, Black people could not even congregate without the presence of a white man in between them,” says Bethel AME’s pastor, the Rev. Mark Tyler.

Today, the AME Church has more than 2.5 million members and thousands of congregations in dozens of nations worldwide.

“Certainly, we’ve made progress,» says Tyler, citing Kamala Harris’ campaign to become the country’s first Black female president. But he also believes that much more needs to be done to bridge America’s racial inequality and he worries about the potential of another Trump presidency. The AME Church, he says, has not “outlived its usefulness.”

“The fact that we have a person who openly embraces white supremacists, who has been president once and potentially could be president again in the 21st century, is all the evidence that you need to know that we still need places for Black people to come together and organize like the Black Church,” he says.

During a recent Sunday service, Tyler encouraged his congregation to vote. Some members later reflected on America’s beginnings and its progress and shortcomings.

“Two things can be said at the same time: They were brilliant in the development of this nation. But they still carried slavery ideas, women were not allowed to vote, and that needed to be changed,” parishioner Donna Matthews said about the Founding Fathers.

“Who are ‘We the people’? I think people need to ask themselves that,” said Matthews, 63, who attended the service with her husband, Keith, and their young grandson, Ezekiel. “It’s everyone. And it’s the essence of why this church was started.”

At the end of the service, parishioner Tayza Hill, 25, led groups on a tour of the church’s museum. It preserves an original wooden pulpit used by the Rev. Allen and Black leaders including abolitionist Frederick Douglass and civil rights pioneer W.E.B. Du Bois when they addressed the congregation.

Hill says she has been hearing the same question in radio shows as the election approaches: “Is the sun rising, or is the sun setting on democracy?” She remains hopeful and believes the continuity of her church is vital.

“Seeing that there’s still a building that has the history and is continuously being told is important because it’s refusing to be erased from history,” Hill says. «As a nation and as a church, it’s really up to us to defend the rights and the respectability of those who are withheld the full opportunity of life, liberty and pursuit of happiness.”

Elon Musk: ¿Cómo el hombre más rico del mundo ayuda a la candidatura presidencial de Trump?

Elon Musk, director ejecutivo de Tesla y propietario de X, habla mientras el candidato presidencial republicano y expresidente Donald Trump observa durante un mitin en Butler, Pensilvania, EEUU, el 5 de octubre de 2024. (Foto: VOA)

Elon Musk, calificado por Forbes como la persona más rica del mundo, se ha convertido en uno de los principales respaldos a la candidatura presidencial del expresidente republicano Donald Trump. ¿En qué consiste esta ayuda y qué beneficios podría reportarle a Musk?

El multimillonario estadounidense Elon Musk ha utilizado su plataforma de redes sociales X y su enorme riqueza para apoyar los esfuerzos del candidato presidencial republicano Donald Trump por ser reelegido, yendo mucho más allá de lo que históricamente hacen los megadonantes políticos.

Musk, de 53 años, quien ha dicho que ha votado por candidatos presidenciales demócratas en el pasado, se ha vuelto más públicamente derechista durante esta campaña electoral. Respaldó a Trump en julio y apareció con él en Pensilvania este mes.

Si es reelegido, Trump prometió convertir a Musk en jefe de una comisión de eficiencia gubernamental, un trabajo que el magnate insistió en que ayudará a librar al país de regulaciones que él considera malas para la economía y un impedimento para hacer negocios.

El CEO de Tesla y SpaceX y propietario de X – conocida anteriormente como Twitter- tiene millones de dólares en contratos gubernamentales y sus empresas enfrentan regulaciones gubernamentales significativas y a veces costosas relacionadas con la protección del consumidor y el medio ambiente.

Ni Musk ni la campaña presidencial de la demócrata Kamala Harris respondieron a las solicitudes de comentarios de Reuters sobre las actividades pro-Trump de Musk.

Estas son algunas de las formas en que Musk apoya a Trump.

El súper PAC

El Comité de Acción Política o súper PAC, una iniciativa financiada por Elon Musk como parte de su apoyo a la campaña electoral republicana del expresidente Trump, está desempeñando un papel importante a la hora de ayudar a movilizar y registrar a los votantes en los estados en disputa que podrían decidir las elecciones.

Musk, clasificado por Forbes como la persona más rica del mundo, hasta ahora ha aportado al menos 75 millones de dólares al comité de acción política, según las revelaciones federales.

El súper PAC gastó alrededor de 72 millones de dólares de ese total en el período de julio a septiembre, según las revelaciones presentadas a la Comisión Federal Electoral. Eso es más que cualquier otro súper PAC pro-Trump centrado en movilizar a los votantes.

El súper PAC está teniendo dificultades en algunos estados en disputa para cumplir con los objetivos de visitas puerta a puerta y está investigando las denuncias de que algunos promotores mintieron sobre la cantidad de votantes con los que se han puesto en contacto, informó Reuters la semana pasada.

La Plataforma X

Musk tiene más de 202 millones de seguidores en la plataforma de redes sociales X, que compró por 44.000 millones de dólares en octubre de 2022, cuando se conocía como Twitter. Desde que apoyó a Trump, ha utilizado la plataforma para promover al candidato republicano. Algunas de sus publicaciones difunden información errónea y siembran dudas sobre la integridad de las próximas elecciones.

En julio, por ejemplo, comentó una publicación del presidente republicano de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, y escribió: “El objetivo desde el principio ha sido importar tantos votantes ilegales como sea posible”, repitiendo la afirmación falsa de que los demócratas están permitiendo intencionalmente la entrada de no ciudadanos al país para que puedan votar en las elecciones.

El mismo mes, compartió un video, generado con inteligencia artificial y manipulando la voz de la vicepresidenta Harris, en el que Harris, hija de padre jamaiquino y madre india, se describía a sí misma como la “contratación definitiva en materia de diversidad” y criticaba al presidente Joe Biden.

Musk ha criticado los programas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) destinados a impulsar la representación racial y étnica en los lugares de trabajo, y en enero, por ejemplo, publicó que “DEI es solo otra palabra para racismo. Vergüenza debería darle a cualquiera que la use”.

X y otras plataformas de redes sociales han estado bajo un mayor escrutinio desde 2016, cuando Rusia interfirió en las elecciones presidenciales de Estados Unidos para tratar de impulsar la candidatura de Trump y perjudicar a su oponente, la demócrata Hillary Clinton.

Desde que Musk adquirió la entonces Twitter en 2022, los grupos de derechos civiles han expresado su preocupación por el aumento del discurso de odio y la desinformación debido a la reducción de la moderación de contenido.

Según la política actual de X, la plataforma puede «etiquetar publicaciones que contengan contenido engañoso para ayudar a las personas a comprender su autenticidad y proporcionar un contexto adicional» o eliminar publicaciones engañosas que tengan un riesgo grave de causar daño.

Sin embargo, los investigadores dicen que sigue siendo una fuente de desinformación electoral, a través de cuentas falsas y la propia amplificación de ese contenido por parte de Musk.

Regalos de un millón de dólares

Musk también promete dar un millón de dólares cada día a personas seleccionadas al azar que firmen su petición en línea comprometiéndose a apoyar la Primera y la Segunda Enmiendas de la Constitución de Estados Unidos, que protegen los derechos a la libertad de expresión y la posesión de armas. La petición sólo está abierta a firmantes que estén registrados como votantes en siete estados en disputa que probablemente decidirán las elecciones presidenciales.

La petición cae en una zona gris de la ley electoral, y los expertos legales están divididos sobre si Musk podría estar infringiendo las prohibiciones de pagar a la gente para que se registre para votar. Los críticos dicen que es una estratagema para ayudar a conseguir apoyo para Trump.

El súper PAC ha estado publicando entrevistas en video promocionales y fotos de personas que han ganado los sorteos de $1 millón en Musk’s X, donde obtienen millones de vistas. Los firmantes de la petición deben proporcionar su dirección y número de teléfono celular, lo que sugiere que podrían ser contactados por los vendedores puerta a puerta del súper PAC.

En ruta de campaña

Musk acompañó a Trump en un mitin el 5 de octubre en Butler, Pensilvania, escenario de un intento de asesinato en julio contra el candidato republicano, y regresó al estado para otras paradas de campaña menos de dos semanas después.

Mientras estaba de gira por Pensilvania, Musk hizo una serie de afirmaciones falsas sobre fraude electoral, algunas de ellas haciendo eco de las realizadas por Trump en los últimos cuatro años.

También animó a la gente a utilizar su plataforma X para poner de relieve posibles fraudes electorales.

«Si la gente cree que hay un fraude, entonces deberían publicar las imágenes, publicar los vídeos, publicar las pruebas», dijo.

Casi la mitad de simpatizantes de Trump prevé problemas en las elecciones, según un sondeo

Trump
EFE/EPA/ERIK S. LESSER

Washington.- Casi la mitad de los simpatizantes del candidato republicano a las elecciones estadounidenses del 5 de noviembre, el expresidente Donald Trump (2017-2021), no confía en que el proceso se desarrolle sin problemas, según una encuesta publicada este jueves.

El sondeo del centro Pew Research señaló que un 42 % de los seguidores de Trump encuestados cree que habrá obstáculos en las elecciones, frente al 90 % de los partidarios de su rival, la vicepresidenta, Kamala Harris, que confían en el desarrollo de los comicios.

En general, todos los indicadores del estudio indicaron grandes diferencias en la confianza que muestran los estadounidenses en la votación dependiendo a quien apoyen: los de Harris se fían mayoritariamente más que los de Trump.

Un dato en el que coinciden demócratas y republicanos es en las dudas que les genera la neutralidad del Tribunal Supremo, de mayoría conservadora, en caso de que deba resolver algún asunto relacionado: solo un 20 % confía. Aun así, los de Trump se inclinan más por una resolución neutra que los de Harris (34 % versus 6 %).

Los del republicano desconfían, sobre todo, del recuento de los votos y las posibles amenazas tecnológicas que pueda sufrir el país.

Solo un 38 % de los votantes del exmandatario aseguró que los votos por correo se contabilizarán correctamente. Un dato que refleja los intentos de desprestigiar esta forma de voto por parte de Trump, tildándolo de manipulable, pese a que en las últimas semanas se ha mostrado abierto a que los suyos voten por correo.

Una cifra parecida de republicanos (42 %) declaró que no cree que se vaya a saber «claramente» quién ha ganado las elecciones una vez finalizado el recuento, frente al 85 % de los de Harris que sí lo piensan.

Pese a que la vicepresidenta ha lanzado mensajes para tranquilizar a la ciudadanía en lo relativo a la seguridad tecnológica de las elecciones frente a un eventual hackeo, un 30 % de votantes demócratas se muestran escépticos.

En esta pregunta, casi siete de cada diez republicanos no sienten que el sistema electoral en EE.UU. esté seguro ante las amenazas tecnológicas. El porcentaje ha aumentado 27 puntos respecto al del sondeo previo a las anteriores elecciones (40 % en 2020 frente al 67 % ahora).

El número total de estadounidenses que confía en los sistemas de ciberseguridad de las elecciones se sitúa en el 52 %.

La sombra de la influencia que países como China, Rusia o Irán podían estar ejerciendo en esta campaña ha sido uno de los asuntos de seguridad más comentados. Precisamente el miércoles, Microsoft publicó un estudio sobre el papel que estaban jugando a dos semanas del día de las elecciones.

El informe concluyó que había actores iraníes centrando sus operaciones de ciberdelincuencia en la campaña de Trump y rusos que estaban generando con inteligencia artificial (IA) contenido contra Harris.

Y advirtió, «los adversarios extranjeros amplificarán las acusaciones de amaño de las elecciones, fraude electoral u otros problemas de integridad electoral para sembrar dudas sobre el resultado y socavar la confianza internacional en Estados Unidos».

Young women lean Democratic. Now the election may hinge on Harris’ ability to run up the score

Democratic
University of Pittsburgh freshman Teba Latef, center, talks with a reporter on campus in Pittsburgh, Thursday, Sept. 12, 2024. (AP Photo/Gene J. Puskar)

PITTSBURGH— At the University of Pittsburgh, as freshmen students took their first steps on campus and swarms of lanternflies buzzed through the air, the sounds of Taylor Swift and Chappell Roan drifted from a folding table draped with an iridescent pink tablecloth.

Fruit snacks and colorful butterfly hairclips were laid out next to pink stickers that said “Saving Democracy is Hot” and “Hot Peeps Vote.” The organizers wore shirts that said “Hot Girls Vote.»

The voter registration drive was run by NextGen America, a progressive organization that’s trying to increase turnout among young women in battleground states such as Pennsylvania.

Meredith Wenthur, who recently moved from North Carolina to Pittsburgh to start college, stopped by the table to register and said she plans to vote for Democrat Kamala Harris. She was thrilled by the vice president’s performance in the debate with Republican Donald Trump, saying it was “really something» to see a woman assert herself like that against a man.

While young women have leaned more Democratic than Republican, this year’s election could see a historic gender gap as Harris tries to become the country’s first female president and the fight over abortion rights remains an animating issue.

“Men shouldn’t have a say in what women can and can’t do with their bodies,” said Wenthur, 18.

And in Allegheny County — which has voted for a Democratic president in the past five election cycles — turnout of young women will be crucial in the country’s largest battleground state. As of Oct. 21, the county has registered more than 88,670 18- to 24-year-olds this election cycle, and more than 183,232 25- to 34-year-olds, according to state data. Combined they represent almost 30% of the county’s voting population of more than 943,221 registered voters.

There are 522,536 registered Democrats and 270,952 registered Republicans.

Getting this traditionally Democratic group to the polls will be crucial for Harris, since surrounding, more rural, Republican counties could deliver a victory for former President Trump.

Young women are politically activated on campus

Trump is trying to galvanize young men who are disoriented by these gender shifts, frequently emphasizing his masculinity in campaign speeches and imagery. In recent speeches, Trump has added a refrain about how women must be sheltered from the world and casting himself as their “protector.”

“They will finally be healthy, hopeful, safe and secure,” he says. “Their lives will be happy, beautiful and great again.”

Harris, in turn, says Republicans are “simply out of their mind.”

“It’s clear that they just don’t trust women,” she says on the campaign trail. “Well, we trust women.”

Jessica Herrera, a senior director at Supermajority, a liberal organization focused on mobilizing young women, said abortion is a potent issue because it’s a symbol of autonomy.

“When candidates and politicians talk about abortion, it isn’t the procedure itself,” she said. “It’s the power that we have to make decisions about our own lives.”

Supermajority’s research focuses on young women who are infrequent voters or don’t vote, and Herrera thinks Harris is poised to expand the electorate.

“If we see a surge this year, it’s going to be young women voters,» she said. «They have come around in a way that I think is surprising.”

Celinda Lake, a Democratic pollster, said Trump’s message is off-putting for women.

“Women want to be empowered. Women want to have freedom. Women want to have control,» she said. «He talks about protection. He talks about him being in control.”

Karoline Leavitt, Trump’s national press secretary, said while Harris could potentially become the first female president, “she has implemented dangerously liberal policies that have left women worse off financially and far less safe than we were four years ago under President Trump.”

The stakes are high in Pennsylvania

Allegheny County, with a population of 1.25 million people, is a blue tile in an otherwise red patchwork of surrounding counties.

President Joe Biden won the state by a little more than a percentage point four years ago. Hillary Clinton lost it by an even slimmer margin four years before that.

In this election cycle, Pennsylvania has generated the most attention by far from both candidates. As of Oct. 22nd, they will have made 50 stops in the state, according to Associated Press tracking of the campaigns’ public events.

Chris Borick, a professor of political science at Muhlenberg College in Allentown, said enthusiasm among young women for Harris could help put her over the top.

“This is one of those places where you could see something really different,” he said.

Still, some women aren’t convinced, even with the tens of millions of dollars each candidate has invested in the state.

Teba Latef, an 18-year-old Pittsburgh freshman studying neuroscience, said she’s undecided and feels like Trump and Harris don’t speak with nuance about important issues.

“They take advantage of different kinds of people,” she said, “Trump takes advantage of men who feel like they’re being left behind and Harris is manipulating women who are concerned about their reproductive rights, knowing that realistically bringing the nationwide right to abortion back is nearly impossible.”

Momentos memorables del debate abierto de Kamala Harris en CNN

Kamala Harris

Kamala Harris fue a una cafeteria de Filadelfia el miércoles a medio día para compartir con sus voluntarios, y en la noche acudió a un foro organizado por CNN, donde enfrentó preguntas de votantes indecisos. Donald Trump se negó a participar en un segundo debate con ella.

 La vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris, dijo en ul encuentro televisado con votantes indecisos que Estados Unidos «merece tener un presidente que se base en el sentido común, en lo práctico y en lo mejor del pueblo, y no en ellos mismos”.

En ese sentido la demócrata prometió a los votantes de Pensilvania -estado en disputa que los dos partidos necesitan ganar para asegurar la victoria- que ella será «una presidenta para todos los estadounidenses», mientras que tildó a su rival, el expresidente Donald Trump, de ser un fascista y un peligro para su país.

Las ofensas están siendo una estrategia recurrente, por las dos campañas, en este tramo final de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.

En este encuentro coordinado por CNN, en la que la vicepresidenta contestó a preguntas de todo tipo por parte de los asistentes, Harris acusó al magnate republicano de ser «incapaz y no apto para servir».

También hizo referencia a informes de que el ex jefe de gabinete John Kelly dijo en una serie de entrevistas que el expresidente habló de la lealtad de los generales nazis al dictador Adolf Hitler.

«Creo que Donald Trump es peligroso. Cuando tienes un presidente de Estados Unidos que le ha dicho, supongo que muchas veces en la Oficina Oval, a sus generales, en esencia: ‘¿por qué no pueden ser más como los generales de Hitler?'», añadió.

Además, destacó que Trump «admira» a los dictadores y criticó su relación con líderes como el norcoreano Kim Jong-un o el ruso Vladímir Putin.

Economía e inmigración, las mayores preocupaciones

Sobre la economía, una de las principales preocupaciones de los votantes, según las encuestas, la vicepresidenta señaló que su plan fiscal beneficiará a las familias de clase media -y aprovechó para reiterar sus orígenes humildes-

«No subiré los impuestos a nadie que gane menos de 400.000 dólares al año, pero debemos tomar en serio el sistema que beneficia a los más ricos y no ayuda a los estadounidenses de clase media trabajadora», dijo.

En referencia a la frontera con México y la inmigración, la vicepresidenta señaló que quiere que se incluya una «vía integral para la ciudadanía» en un esfuerzo por solucionar «este problema», así como más agentes y personal fronterizo.

Harris, además, criticó nuevamente a Trump por interferir en un proyecto de ley bipartidista en el Congreso que podría haber cubierto parte de los problemas fronterizos.

La demócrata no respondió si sería más pro-Israel que Trump, ni tampoco respondió a una pregunta sobre lo que haría para garantizar que no mueran más palestinos a causa de «bombas financiadas con dinero de los contribuyentes estadounidenses».

Aquí hay algunos momentos clave según reporta AP

Harris dice que Trump es un fascista
No dejó dudas de que cree que su oponente puede ser caracterizado por la ideología autoritaria de extrema derecha. Cuando Anderson Cooper de CNN le preguntó si cree que Trump es un fascista, Harris respondió sin rodeos.

«Sí, lo creo», dijo. «Sí, lo creo».

Su respuesta llegó poco después de que John Kelly, exjefe de gabinete de Trump, usara el mismo término para describir al candidato republicano.

Los comentarios de Harris fueron una versión más atrevida de una respuesta que dio durante una entrevista la semana pasada.

El presentador de radio Charlamagne Tha God se refirió a la visión de Trump para el país como fascismo y preguntó: «¿Por qué no podemos simplemente decirlo?»

«Sí, podemos decirlo», dijo Harris.

Harris amplía su brecha con Biden
Desde que fue catapultada a la cima de la lista demócrata, la vicepresidenta ha luchado con preguntas sobre en qué se diferencia del presidente Joe Biden. Harris se ha mostrado reacia a distanciarse de él a pesar de que los votantes parecen ansiosos por un cambio de dirección.
Sin embargo, Biden aparentemente le dio luz verde retórica para romper más con él, diciendo que «trazaría su propio camino» si fuera elegida.

Harris parece haber aceptado tentativamente la oportunidad. Harris dijo repetidamente el miércoles por la noche que ofrecería “un nuevo enfoque” para gobernar en lo que respecta al cuidado de los ancianos y la reducción de los costos para el consumidor.

“No voy a evitar decir, oye, estos siguen siendo problemas que debemos solucionar”, dijo Harris.


Harris habla sobre su fe personal
La vicepresidenta no suele hablar de su religión, pero reveló más durante el foro abierto.

Cooper le pidió a Harris que reflexionara sobre el día en que Biden abandonó su candidatura a la reelección y la apoyó, en particular sobre una llamada que tuvo con su pastor.

“Necesitaba ese consejo”, dijo sobre su conversación con el reverendo Dr. Amos Brown en San Francisco. “Necesitaba una oración”.

También dijo: “Oro todos los días, a veces dos veces al día”.

Harris dijo que fue criada con la idea de que “tu fe es un verbo”, lo que significa que es importante poner las creencias en acción para ayudar a los demás.

Los antecedentes y la vida personal de Harris involucran una mezcla de religiones. Anteriormente habló sobre asistir a servicios en una iglesia bautista y un templo hindú mientras crecía en California. Su esposo, Doug Emhoff, es judío.


Le preguntaron a Harris sobre sus debilidades

Los candidatos pasan mucho tiempo hablando de sus fortalezas, por lo que uno de los votantes le preguntó a Harris sobre sus debilidades.

“Ciertamente no soy perfecta, así que empecemos por ahí”, dijo riendo.

Harris dijo que se rodea de “gente muy inteligente” a la que presiona para obtener respuestas sobre temas complicados.

“Constantemente digo: ‘Vamos a probar eso’”, dijo. Harris dijo que es cautelosa porque “mis acciones tienen un impacto directo en personas reales de una manera muy fundamental”.

Sonaría como una clásica evasiva política, como cuando un candidato dice que su mayor debilidad es que se preocupa demasiado. Pero su respuesta insinuó críticas reales que ha enfrentado a lo largo de los años.

A veces, Harris es conocida por prepararse hasta el punto de la parálisis, y a veces no está dispuesta a correr riesgos.

Trump: Harris tiene bajo coeficiente intelectual

Trump, por su parte, pasó la jornada del miércoles haciendo campaña en Georgia -estado que perdió contra Joe Biden en las elecciones de 2020- donde hizo campaña en una iglesia comunitaria en Zebulon y dio un discurso ante el comité de acción política Turning Point.

Desde Duluth, el republicano dijo que Harris «no tiene ni idea de economía, no es una persona inteligente y es alguien con bajo coeficiente intelectual».

Trump también atacó el candidato demócrata a la vicepresidencia, Tim Walz, al llamarlo un «tipo enfermo».

«Ni siquiera se puede decir, ‘Bueno, vayamos con el vicepresidente’. Porque él es realmente un enfermo, ¿verdad? Recuerden que nos llamó a JD Vance y a mí ‘raros’. No somos raros», anotó.

El gobernador Walz, votó hoy en su estado, Minnesota, y el senador Vance, compañero de fórmula de Trump, hizo el miércoles campaña en Nevada, otro estado clave en estas elecciones.