Alba Martínez es una puertorriqueña que ha dado mucho a la comunidad latina, no solo de Filadelfia, sino de todo Pensilvania; son de esas personas que impulsan el crecimiento y la prosperidad de los latinos en Estados Unidos.

Ha estado en diferentes momentos de la historia de Filadelfia, y su trayectoria demuestra un gran amor a la comunidad latina, para la cual quiere prosperidad.

Después del proyecto de “La Guagua 47” se volvió una embajadora latina; luego trabajó en la ideación de la iniciativa “Street Knowledge”, y ahora es la titular de la Secretaría de Comercio de la Ciudad de Filadelfia, nombrada por la alcaldesa Cherelle Parker.

ENTUSIASTA DE TRABAJAR CON PARKER

Alba considera que Cherelle Parker es ya una figura histórica en Filadelfia. Es la primera mujer alcaldesa de esta ciudad, donde se declaró la independencia de Estados Unidos, y se estableció la democracia americana; que, aunque en desarrollo “work in progress”; ha tenido un impacto transformativo en el mundo entero. Considera que Parker también es una figura histórica porque, viniendo de orígenes humildes, demuestra que en las comunidades hay un talento extraordinario. “Ella es una persona que balancea muy bien el respeto por la ley y el orden que necesitamos, con el compromiso con la inclusión y la igualdad. Queremos equidad, pero también queremos una sociedad que funcione para todo el mundo; eso me motivó a querer acompañarla en su gabinete”, afirma Alba.

Ella solicitó ser parte de su equipo y Parker la seleccionó en un proceso competitivo. Dice que el trabajo que tiene ahora en el Departamento de Comercio es el ideal para su misión, ser un agente de cambio en el crecimiento económico de la ciudad; una necesidad clara de Filadelfia. “Cuando crece la economía crecen los ingresos y tanto en la familia como en el gobierno tenemos más para invertir; y como yo digo en inglés, ‘a Wealthy City is a healthy city’, (“una ciudad rica es una ciudad sana”), afirma.

SERVIR A LOS EMPRENDEDORES LATINOS

El Departamento de Comercio es una herramienta de servicio que está allí para ayudar a todos a crecer. Alba se dice comprometida a trabajar para impulsar el crecimiento económico de la ciudad en todas sus esquinas; y para contribuir a este propósito añadió a Javier Mojica a su equipo. Como ella, es de origen puertorriqueño y es bilingüe. Su compromiso es ayudar a cualquier persona, en especial en su caso a la comunidad latina, que quiera saber cómo el Departamento de Comercio los puede ayudar a crear o hacer crecer a su negocio.

Abrir su negocio y superar los obstáculos que esté enfrentando, la confusión, lo que sea, esta oficina les va a dar una mano para que puedan lograr el crecimiento que quieren. “Pueden ser negocios ya establecidos, o que necesitan crecer, porque la ciudad tiene un compromiso grande con diversificar; por ejemplo, en quiénes reciben los contratos de la Ciudad; o pueden ser proyectos de desarrollo económico, de transporte, lo que sea”, asegura.

Precisa que un problema común es que muchos de los pequeños negociantes no tienen empleados, y eso se puede mejorar con inversión de capital, con estrategias de crecimiento.

Javier Mojica es uno de los directores de la Oficina de Servicios a los Negocios; se encarga de ayudar a los negocios a navegar cualquier situación que tengan, por ejemplo, en sus trámites con otros departamentos de la ciudad. Él es un puente de información y especialmente busca servir a los hispanos y latinos, sobre los programas y servicios que tienen para establecer o para incrementar sus negocios.

Javier afirma que en el Departamento y en el ecosistema comercial de Filadelfia hay muchos recursos disponibles para la comunidad. De la A la Z están haciendo herramientas para ayudar a la gente a imaginar su negocio y a desarrollar las ideas claves para el negocio. Esos recursos existen. “La letra B es sacar los permisos”, dice. “Nosotros les enseñamos a navegar ese terreno. Estamos creando una herramienta en internet que se llama el ‘Permit Navigator’, que les va a facilitar el proceso de conseguir sus permisos, apoyado con un número de teléfono para llamar si hay confusión. Tenemos recursos para diferentes etapas de desarrollo y a diferentes niveles de sofisticación y complejidad”, explica.

Alba asegura que la planeación, conseguir capital y competir, es un camino que se dificulta cuando no hay acceso a la información, a veces es algo confuso, donde no es fácil encontrar lo que se necesita. A veces hay barreras del idioma y eso crea inseguridad; a veces las instituciones hablan un lenguaje intimidante. “Por eso, hay que simplificarle la información a la gente, y eso les hace sentir que los queremos; que nuestra intención no es excluir. Y es importante que la gente coja el teléfono y empiece a llamar, que se atrevan”. Cree que, a los latinos, a veces los crían pensando en el respeto, a que deben esperar que los inviten, “pero si tú quieres abrir un negocio, te tienes que lanzar, tienes que ser agresivo. Y nosotros queremos ayudarlos a superar esos miedos, porque la oportunidad está ahí”.

Javier espera que las empresas latinas se comuniquen más con ellos; ya que tienen los programas y servicios necesarios para que esa persona o negocio crezca o se establezca en la ciudad, y que estén informados de todos los programas y servicios; y mostrarles las oportunidades de financiamiento que hay, que es algo muy importante. Ambos consideran que, en el área de alimentos, por ejemplo, hay grandes posibilidades de emprender y tener éxito.

Su labor es conectar con los diferentes recursos de la ciudad y las organizaciones que pueden ayudar a los negocios.

El trabajo de su oficina es ayudar en todo el proceso de abrir un negocio; desde la estructura del negocio; el EIN, (Número de Identificación de Empleador), que se obtiene en el IRS, luego el ITIN, para poder pagar los ‘taxes’; y la “Commercial Activity License” que es la licencia para abrir el negocio. Ellos ayudan paso a paso con todo ese proceso. También, si necesitan hacer mejoras a la fachada del negocio, o si necesitan cámaras de seguridad, ellos pagan hasta un 75% de las cámaras.

FORTALECER LAS REDES LATINAS

Alba explica que tienen relaciones con muchas organizaciones de la ciudad que también son motores de progreso y de ayuda; “por ejemplo, la Hispanic Chamber of Commerce, que es liderada por Jennifer Rodríguez, nosotros tenemos una gran relación ellos. Su misión es ayudar específicamente a los negocios latinos a crecer, y Jennifer es una experta en eso. También tenemos una relación extraordinaria con Esperanza, para revitalizar el corredor económico de la calle cinco. Tenemos una alianza con HACE también para ese corredor. Y traemos unos proyectos de empleo que la alcaldesa le llama los “People’s Stimulus”, que son casi 300 personas a las que se les pagará para que mantengan unos 80 diferentes corredores de negocios, limpios, bonitos y atractivos. Esperamos que nos otorguen los fondos”.

“Imagínate”, continúa Alba, “que el corredor que maneja esperanza y HACE lo llamemos ‘Corredor de Arte y de Luz’; y que esté limpio, con cada uno de los frentes hermosísimos, con espacios que invitan a la gente a comer, a pasear, a celebrar y a gastar dinero; eso son motores de desarrollo económico”.

Invitan a todos a aprovechar las alianzas, que vayan a Esperanza, a la Hispanic Chamber, etcétera; “porque si queremos ser negociantes, tenemos que perder el miedo a empujar nuestras agendas, con cariño y con amor, pero empujar; y entre todos podemos lograr mucho más que si estamos divididos”.

Alba también resalta a la comunidad mexicana del sur de Filadelfia; dice que es una zona de pequeños comerciantes, “extraordinaria y con mucha energía”, e invita a establecer lazos más importantes. “Hemos hablado con Edgar Ramírez, con Olga Rentería y con Arianne Bracho para decirles ‘mira, organicemos grupos de gente donde podamos ir Javier y yo; y nos llevamos a Jennifer, invitamos a María y al reverendo Cortés y nos reunimos a ver qué podemos hacer juntos’ ”.

UN LLAMADO A LA ACCIÓN

La idea con el proyecto “Street Knowledge” era traer educación directamente a la comunidad; crear un campus educativo en el barrio, porque la gente necesita acceso a la educación, y Alba quiere continuar con ese proyecto, “yo sigo comprometida con llevar educación a la comunidad; pero sí necesitamos que la gente nos invite; o sea, nosotros sí podemos empujar una agenda, pero también tiene que haber un empuje de parte de las personas”.

Los negocios toman tiempo para construir; son procesos, y hay que trabajarlos; y ese es su compromiso. Desde la Oficina de Negocios quieren apoyar a los proyectos, sean grandes o pequeños; es lo que la alcaldesa les ha pedido; y también, buscar empleos, conectar a la gente con empleos en la ciudad. Un ejemplo es que la ciudad tiene una necesidad de mil policías. Un policía empieza ganando 62.000 al año; un excelente salario; y hay otros, también bien pagados, “los trabajos de la policía son ‘Life changing salaries’, son buenísimos”. Exhorta Alba.

“Personas, como Jennifer, como el reverendo Luis, que es un líder de esta comunidad y que ha hecho trabajo desde cero, seguro les pueden compartir cómo han hecho para llegar a donde han llegado, cuáles son las estrategias efectivas; y cómo se logran los objetivos que quieren”, afirma Alba apasionada. Explica que el gobierno es un agente facilitador, que puede ayudar para organizar eventos para la comunidad.

“Cuando yo quería estudiar derecho, mi mamá fue la que me llenó los papeles de admisión; si no, yo no hubiera ido a Georgetown, porque me intimidaba el proceso. Pero yo fui la que estudié y la que saqué las notas y la que me gradué. Entonces, nosotros podemos facilitarles esos procesos; pero es un trabajo duro, y solo juntos podemos lograr un avance real”. “Miremos a la alcaldesa Parker, que llegó de unos orígenes bien humildes a ser la primera alcaldesa en la historia de Filadelfia; que su ejemplo nos inspire para transformar la realidad económica latina y de todos los habitantes de Filadelfia”, concluye.