En la conferencia de prensa de la semana pasada, después de la reunión del Comité de Mercado Abierto celebrada en Washington, el presidente del banco central Jerome Powell explicó la decisión de disminuir la tasa de interés de los fondos federales en un cuarto de punto porcentual, a un rango de entre 4 y 4.25 por ciento. Para hacerlo, según el Wall Street Journal (09|18|25), el presidente Powell usó al menos seis veces el término “riesgo de deterioro,” para enfatizar “el cambio en el balance de riesgos.”

Ante el impacto inflacionario esperado por los aranceles decretados por la Casa Blanca, además del hecho que la inflación siguió elevada en 2.9 por ciento en julio, el banco central decidió volcar la atención hacia el declinante mercado laboral. Como lo revelaron las últimas cifras revisadas, la creación de empleo fue magra durante el último trimestre, mientras que la tasa de desempleo aumentó a 4.3 por ciento, desde una tasa que osciló entre 4 y 4.2 por ciento durante el año anterior. Entre otros factores, el mercado de trabajo se ha deteriorado por las crecientes deportaciones que están reduciendo el tamaño de la fuerza laboral.  

Con la inflación todavía elevada, mientras que el empleo pierde impulso, el banco central no puede lidiar con ambos simultáneamente. Como dijo el presidente Powell, “nuestras herramientas no pueden hacer dos cosas a la vez,” por ende “ahora no hay caminos sin riesgo.”

*Analista y consultor internacional, ex-director de la Oficina de la CEPAL en Washington. Comentarista de economía y finanzas de CNN en Español TV y radio, TELEMUNDO, UNIVISION y otros medios.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí