A pesar del cierre del gobierno federal en Estados Unidos, la Oficina de Estadísticas Laborales la semana pasada divulgó las cifras mensuales sobre inflación en septiembre, requeridas para ajustar las pensiones a los aumentos en el costo de vida. En contraste, las cifras sobre empleo en septiembre aún no han sido divulgadas.
Los precios al consumidor aumentaron levemente en septiembre, 3 por ciento desde el año pasado, más que 2.9 por ciento en agosto. Este aumento, alejándose de la meta de 2 por ciento, todavía es visto como favorable para el recorte de la tasa de interés esperado al fin de la reunión del banco central, que comienza hoy en Washington. Además, este leve aumento de los precios al consumidor puede indicar que los aranceles impuestos por la Casa Blanca aún no generan presiones inflacionarias significativas. Aún así, en septiembre algunos productos sensibles a los aranceles registraron alzas de precios superiores al promedio, tales como el mobiliario, las prendas de vestir y los artículos deportivos.
No obstante, entre los inversionistas persiste la fuga hacia la seguridad, como lo ilustra el alza en el precio del oro encima de $4,000, el cual retrocedió esta semana. La volatilidad también ha retornado a las bolsas de valores. Después de seis meses de alzas récord, generadas por el auge de la inteligencia artificial, algunos analistas las consideran indicativas de una burbuja. Finalmente, debido al cierre del gobierno, las cifras sobre empleo no están disponibles, pero fuentes privadas han revelado que persiste la desaceleración en el mercado laboral, causada primordialmente por las redadas en contra de trabajadores extranjeros.
*Analista y consultor internacional, ex-director de la Oficina de la CEPAL en Washington. Comentarista de economía y finanzas de CNN en Español TV y radio, TELEMUNDO, UNIVISION y otros medios.

